Inicialmente, Bell confesó sentirse “cauteloso” al ser abordado para el documental, dado un incidente previo donde se le criticó duramente por rechazar otro proyecto similar. “Me dijeron que personas como yo eran el problema”, explicó Bell, destacando la presión que enfrentó anteriormente para participar en documentales sensibles.
Sin embargo, tras un encuentro con una de las directoras del proyecto, Emma Schwartz, Bell sintió una conexión genuina que lo llevó a reconsiderar su participación. Según sus palabras, la sensibilidad y autenticidad de Schwartz lo convencieron de darle una oportunidad al proyecto.
Durante la entrevista, Bell compartió detalles sobre su experiencia personal mientras trabajaba en el documental. Reveló haber ingresado a rehabilitación para abordar traumas pasados, incluyendo abusos sexuales sufridos en su infancia. Esta etapa de su vida, marcada por terapias grupales e individuales, le permitió replantearse su participación en “Quiet on Set”.
“Tu día entero se llenaba trabajando en procesar estas experiencias con una mente clara”, explicó Bell sobre su tiempo en rehabilitación. Este proceso, aunque desafiante, lo llevó a considerar la importancia de compartir su historia de manera más abierta.
“Encuentro bastante vacías sus respuestas [de Nickelodeon], porque, quiero decir, todavía transmiten nuestros programas, siguen poniendo nuestros programas. Y tengo que pagar por mi propia terapia… Si hubiera algo, si hubiera alguna verdad detrás de que realmente les importa, habría algo más que citas en una página por obviamente un representante legal diciéndoles exactamente cómo ajustar una respuesta.”
Bell no solo compartió su propia experiencia de abuso, sino también cómo afectó a su familia. En particular, destacó la participación de su padre en el documental, quien enfrentó acusaciones de homofobia al expresar preocupaciones sobre el presunto abusador de su hijo.
El actor reconoció el valor de incluir a su padre en el proyecto como una forma de sanación personal y familiar. A pesar de las emociones involucradas, Bell enfatizó la importancia de abordar estos temas difíciles en un entorno seguro y comprensivo.
En otro aspecto de la entrevista, Bell discutió la respuesta de Nickelodeon ante las revelaciones presentadas en el documental. Aunque reconoció la naturaleza cuidadosamente redactada de su respuesta, expresó escepticismo sobre la sinceridad de la red de televisión hacia las víctimas.
Además, el actor abordó su relación con Dan Schneider, figura central en varias series de Nickelodeon señaladas por presuntos abusos y comportamientos inapropiados. A pesar de mantener una relación profesional cercana con Schneider, Bell enfatizó la importancia de validar las experiencias de otros afectados por presuntos abusos en la industria del entretenimiento.
La entrevista concluyó con Bell reflexionando sobre los desafíos personales que enfrentó a lo largo de los años, incluidos problemas legales y de salud mental. Al abordar su pasado y las repercusiones de su experiencia en la rehabilitación, Bell destacó la complejidad de su proceso de sanación y el impacto de la desinformación en su percepción pública.
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