El sueño de Adalberto “Pelón” Rosas, de traer agua desde Nayarit a Sonora ha sido retomado por el gobierno de Alfonso Durazo, al anunciar el gobernador avances en el Plan Hidráulico del Noroeste (Plhino).
De las reuniones de gobernadores del Mar de Cortés, destaca el acuerdo entre el gobernador de Nayarit, Miguel Ángel Navarro y el mandatario Durazo para construir la infraestructura hidráulica necesaria para traer agua a Sonora desde tierras nayaritas obviamente con la autorización o el apoyo de Sinaloa.
El proyecto de revivir el Plhino no es nuevo en el gobierno estatal al ser anunciado en noviembre del año pasado por el mismo gobernador Durazo, destacando la inversión requerida de 47 mil 500 millones de pesos para realizar obras en etapas por los próximos 30 años, informando el mandatario estatal este martes de los acuerdos con Nayarit y la inversión inicial para revivir el proyecto de poco más de 8 millones de pesos.
Desde luego que el Plhino proyectado por la entonces Secretaría de Recursos Hidráulicos en los años 70´s proyectaba una inversión de 47 mil 500 millones de pesos, cifra que en aquellos años y ahora es un mundo de dinero, y si se actualizan los costos seguirá siendo un sueño, aunque el gobernador Durazo aclaró que con la bendición del gobierno federal todo se puede.
Ante la grave sequía que azota a Sonora con el sistema de presas a un 12 por ciento de su capacidad y otras más como la Abelardo L. Rodríguez, en Hermosillo, sin una gota de agua, es necesario buscar otras alternativas que el acueducto de El Novillo o explotación de pozos para abastecer la capital sonorense, por lo que el Plhino es una opción pero muy costosa y expuesta a los vaivenes políticos de los gobiernos de Nayarit y Sinaloa, como también lo es recurrir a la construcción de plantas desaladoras en las costas sonorenses.
Algo se tiene que hacer para garantizar el abasto de agua a la población, pero también al sector industrial, comercial y para la agricultura en Sonora, sobre todo en estos momentos en que la entidad busca inversión extranjera y nacional usando de bandera el Plan Sonora de Energías Sostenibles, pero los inversionistas demandan garantizar energía eléctrica barata entrando al quite las plantas solares con energía fotovoltaica, exigen seguridad y agua suficiente, entre otras demandas más como paz laboral, mano de obra calificada y barata, facilidades fiscales, terrenos, permisos, etc.
El añejo proyecto del Plhino de hace 50 años contemplaba presas de almacenamiento, derivadoras, canales de interconexión, canales de conducción, plantas de bombeo, sistemas de distribución, drenaje y caminos, a un costo proyectado de 47 mil 500 millones de pesos “de los de antes”.
De acuerdo con el titular de la Comisión Estatal del Agua (CEA), Ariel Monge, para trasladar agua de Nayarit a Sonora se necesitarían cerca de mil kilómetros de canales de concreto.
“Este proyecto se está trabajando este año, lo vemos muy realizable. Inició en 1970 y le falta poco. Pensamos que se puede su realización para aumentar el nivel del agua en Sonora”, dijo el vocal ejecutivo de CEA.
El gobernador Durazo en su conferencia de prensa de este martes reconoció el gran reto del Plhino. “Es un proyecto extraordinario, cuesta mucho dinero, pero tampoco es la gran cosa para un gobierno federal que tenga el compromiso de resolver, primero, las inundaciones de Nayarit, las necesidades de agua de Sinaloa -que a veces la pasa tan mal como nosotros en materia de falta de agua- y obviamente el estado de Sonora”, dijo.
“Los gobernadores del Golfo tenemos ya un acuerdo de plantear de manera conjunta la conveniencia de retomar el Plan Hidráulico del Noroeste. Nosotros desde el Gobierno del Estado estamos destinando 8 y pico de millones de pesos para la actualización del proyecto. ¿Por qué lo toma el Gobierno del Estado? Porque somos los más interesados en tener agua”, indicó Durazo.
Si mal no recuerdo en 1995 como parte del intento de revivir el Plhino se construyó en el municipio de El Fuerte, Sinaloa, la presa Huites también conocida como Luis Donaldo Colosio, una de las más grandes del País, pero en estos momentos al igual que el sistema de presas sinaloense, como bien lo advierte Durazo, sufre los estragos de la sequía al igual que Sonora al estar a sus más bajos niveles de capacidad de almacenaje.
Siguiendo con el tema de la grave escasez de agua en Sonora por la falta de lluvias, el gobernador Durazo dijo que con la finalidad de realizar las acciones y reasignar los recursos necesarios para la atención del abasto de agua en la entidad, el Gobierno de Sonora trabaja en un Plan Estratégico de Protección Civil en materia Hídrica.
El mandatario estatal destacó que con esta estrategia, el Gobierno de Sonora tiene la flexibilidad de implementar un plan de acción, para contar con los recursos y herramientas necesarias para contar con el abasto de agua para toda la entidad en los próximos años, ya que este 2024 se tiene asegurado el abastos en los 72 municipios de la entidad.
Junto a la UGRS, se concretaron seis proyectos para garantizar que la siembra y ganado de la región no se vea afectada por la falta de lluvia, implementando el programa emergente de distribución de agua en agostaderos; la perforación y equipamiento de pozos de abrevadero con energía solar; alimento para ganado con un 20 por ciento de su valor y el 100 por ciento de flete; fortalecimiento de unidades de riego con el apoyo del 50 por ciento de Conagua; ampliación del convenio con Constellation Brands para la donación de bagazo; y la inducción de lluvias junto a Sagarhpa.
Por parte de la CEA, se están realizando cuatro proyectos para asegurar el abastecimiento de agua potable: la perforación, equipamiento y rehabilitación de pozos en todo el estado; el refuerzo de infraestructura para el abastecimiento en la zona sur de Hermosillo; la adquisición de pipas de agua; y la actualización del Plan Hídrico del Noroeste (Plhino). (g_navarro_ruiz@hotmail.com)