SALVO EN Bolivia, en ningún país del mundo son elegidos con el voto popular los juzgadores federales. En ese país sudamericano tienen trece años experimentando un rotundo fracaso.
En la hora que vive México, se escucha muy contundente la crítica del Presidente al Poder Judicial Federal: “Están al servicio de los más privilegiados. Elegidos por el pueblo, los jueces no tendrán más compromisos que con el pueblo”.
Evidentemente existe toda una estrategia de manipulación en esas palabras. Se está hablando de una reforma al Poder Judicial Federal, es decir, a otro poder del Estado Mexicano cuya función esencial es la de ser garante del estricto cumplimiento de las normas constitucionales y un equilibrio ante sus “pares”, el Ejecutivo y el Legislativo.
Hablar de hacer justicia por delitos del fuero común (un 90 por ciento de los casos) es hacer referencia a los jueces locales, no federales.
Luego entonces, más allá de los “nobles propósitos” de López Obrador de reformar la Constitución para que poco más de 1,600 jueces sean electos por el voto popular, -sin los filtros actuales de evaluación severa y contundente-, conlleva un fin oculto: Evitar que en lo sucesivo, ministras y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, actúen como un contrapeso a los objetivos del Poder Ejecutivo Federal.
En otras palabras. Se busca el control de la Corte por parte de palacio nacional.
Y dentro del lenguaje de la manipulación, se anuncia la puesta en práctica de una “encuesta nacional” por parte de MORENA, para escuchar las voces del pueblo acerca de esta reforma. La virtual Presidenta electa, Claudia Sheinbaum, habla de llevar a cabo un “parlamento abierto” para escuchar a profesionales de la abogacía, universitarios y hasta miembros del Poder Judicial Federal.
Sin embargo, ¿de qué valdrían esos levantamientos de opinión, si AMLO ha advertido que no es negociable la propuesta de que las y los jueces, las y los magistrados y ministros de la Corte, sean sustituidos por quienes elija el pueblo?
La dupla López-Sheinbaum, contarán a partir de septiembre con todo el poder para imponer esta reforma.
Al final del día, si el Poder Judicial –al igual que el Legislativo- queda sujeto al control presidencial, se habrá dado un paso importante rumbo al Estado en manos de una sola persona, colocándonos en una situación regresiva de cincuenta años atrás, cuando el régimen priísta era omnipresente, con una oposición prácticamente inexistente.
Claro, en esta tercera década del siglo XXI, el régimen coquetearía con una dictadura. Se tienen todos los elementos para así establecerlo.
Y EN LA SEMANA que hoy inicia, es muy probable que conozcamos a los integrantes del gabinete de la nueva Presidenta de México… Varios nombres ya han sido filtrados deliberadamente esperando reacciones… Aquí lo interesante sería observar y evaluar las herencias que el presidente saliente dejaría a su sucesora, porque nadie cree que a partir del 1 de octubre se irá a “La Chingada”… Primero dijo que se jubilaría… Hace unos días admitió que participaría siempre y cuando le llamara la Presidenta y, además, se contemplaría sus opiniones… Afortunadamente, todo indica, en las carteras de salud y seguridad pública llegarán dos perfiles probados y comprobados por su capacidad… ¿Qué más quisiéramos?… Aspirar a establecer un sistema de salud digno para la población, con medicamentos suficientes y reducir los índices de violencia… Ojalá… Por lo demás seguirán las becas a fieles seguidores de AMLO… Si doña CSP quiere safárselos, tendrá qué esperar un rato.
DE REGRESO a Sonora, corrió fuerte el rumor el pasado fin de semana acerca de movimientos en el gabinete del gobernador Alfonso Durazo… Al parecer, es un hecho que Aarón Grageda dejará la titularidad de la Secretaría de Educación y Cultura del Gobierno del Estado… Trascendió incluso que ya “sacó sus cosas de la oficina”… Se dijo que podría relevar al loco de Armando Moreno Soto en la Rectoría de la Universidad Estatal de Sonora, pero esto último no es nada seguro… Respecto al relevo de Aarón en la SEC, es un secreto que solo guarda el Gobernador… Nos conformamos con que no elija uno de esos perfiles probados por su incapacidad y que, al igual que “canicas cascadas”, esperan ser compensados por sus afanes en la política.