El Presidente Andrés Manuel López Obrador informó que, cuando concluya su sexenio y se retire a vivir en Palenque, Chiapas, viajará a la Ciudad de México para visitar a su esposa, la escritora Beatriz Gutiérrez Müller.
El Mandatario se refirió al tema durante su mañanera, donde ofreció más detalles sobre cómo será su vida una vez que concluya su gestión al frente del Gobierno federal.
Adelantó que no quiere ser fotografiado, por lo que no viajará en vuelos comerciales.
“No voy a viajar en aviones comerciales porque no voy a ir a los aeropuertos, voy a ver cómo le hago para trasladarme, porque voy a estar viniendo para ver a mi compañera Beatriz, que la amo mucho y que me ha ayudado”, dijo.
“Entonces, cuando yo venga, pues voy a ver cómo le hago, pero voy a estar allá (en Palenque). No estoy metiéndome en nada, además le tengo un gran respeto a la Presidenta electa, la admiro”.
López Obrador hizo un reconocimiento público a su esposa, por el apoyo que le ha brindado en momentos difíciles.
“Bueno, nada más con aguantarme, ya”, soltó entre risas. “Imagínense, con todas las pequeñas presiones que se enfrentan en este noble oficio”.
El Presidente pidió a sus simpatizantes internalizar poco a poco la idea de que dejará la vida pública.
Les dejó en claro que no actuará como intermediario con la nueva Administración.
“Pero repito, y lo repito, porque puede ser que alguien dude, sobre todo los simpatizantes nuestros y que vayan a tener la idea de decir: vamos a ir a ver a Palenque a nuestro compañero para platicar con él, para que nos ayude, nos ponga en comunicación con la Presidenta, no voy a poder hacerlo, yo ya me retiro por completo”, aseveró.
“Voy a atender a mi familia y eso, ya les dije, no se habla de política, yo voy a estar trabajando en mi investigación por el México prehispánico, ya estoy reuniendo mi biografía básica, mis libros básicos, porque no quiero salir a buscar un texto, o no quiero ir a un archivo, no quiero ir a una biblioteca y que me tome una foto, va a ser muy difícil que me deje tomar una foto hacia adelante”.
López Obrador reiteró que no pretende convertirse en líder moral, jefe máximo, caudillo o cacique del movimiento que hoy encabeza.
“Yo ya termino en 100 días, me jubilo”, soltó.
“Y lo sigo diciendo para que se vaya internalizando, muchos que me conocen por mis convicciones, saben que soy congruente y que la honestidad es lo que estimo más importante en mi vida y que no estoy acostumbrado a la hipocresía, a decir una cosa y hacer otra”.
www.reforma.com
