“Nuestros adversarios han actuado de manera responsable, no ha pasado de los insultos, no se ha cruzado la frontera del insulto, en el caso extremo, a la violencia física”, planteó esta mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Destacó que la mayoría de sus opositores han sido inteligentes para no cruzar esa frontera en el país, como ha sucedido en otros puntos del orbe.
“Por eso debemos estar orgullosos y reconocerle también eso a nuestros adversarios, yo se los reconozco mucho”, subrayó.
Sin pregunta de por medio, y cuando exponía sobre su visión para que sean las empresas que operan las plataformas de redes sociales, Internet e inteligencia artificial las que pongan los límites para evitar la denostación, violencia, manipulación y las llamadas fake news, el mandatario federal se refirió a sus opositores y resaltó que se han comportado relativamente bien, al sólo manejarse desde los insultos y señalamientos sin pasar a la violencia.
Y es que, agregó, hay algunos sectores, tanto de derecha como de izquierda, que se dejan llevar por el dogmatismo y el fanatismo.
Recordó que tras el resultado de la jornada electoral del pasado 2 de junio, muchos actores de la oposición no daban crédito del aplastante resultado en favor de la candidata del movimiento de transformación, Claudia Sheinbaum Pardo, y acusaron que se había manipulado a través del inteligencia artificial.
“No, fue esto”, subrayó; y señaló un gráfico con los resultados donde se mostró que en 31 de las 32 entidades, la coalición liderada por Morena obtuvo el triunfo.
“Ésta es la polarización. Ojalá y pudieran hacer la autocrítica. Que informe Claudio X. González ¿por qué tomaron mal estrategia de la guerra sucia? ¿Y por qué invirtieron tanto dinero en eso? ¿Y de dónde se originó, de dónde obtuvieron ese dinero? ¿Cómo lo distribuyeron? ¿Quiénes aportaron? Ellos tienen una asociación que se supone es para combatir la corrupción, entonces están obligados a actuar con transparencia, ¿cuánto dinero recibieron del extranjero? Y los intelectuales a los que contrataron que hicieran una autocrítica. Estoy esperando que den una explicación (…) y siguen con la polarización y la otra palabrita que pusieron también de moda los abajo formantes: ‘la deriva autoritaria’”.
El jefe del Ejecutivo aseguró que México “es un país de libertades, (donde) no se reprime a nadie, no se censura a nadie. Y aquí estamos todas las mañanas (en sus conferencias) en este diálogo circular y aclarando todo”.