ASÍ REZA el refrán: “Cuando el gato no está, los ratones bailan”, es decir, “en ausencia del jefe o del superior, los subordinados se relajan y hacen cosas que normalmente no harían”, así se lee en “Google”.
No es el caso del Gobierno de Sonora en este periodo vacacional 2024 de verano, donde la inmensa mayoría de burócratas disfrutan de sus vacaciones.
Y es que el gobernador Alfonso Durazo decidió permanecer y cumplir con una nutrida agenda, lo que obligó a los principales funcionarios a seguir atendiendo sus asuntos en las diferentes secretarías y organismos desconcentrados.
No es para menos. La situación en el país exige la presencia de los mandatarios estatales, no solo porque el Presidente López Obrador sigue en activo, sino porque la virtual Presidenta electa, Claudia Sheinbaum, está apareciendo todos los días ante la opinión pública haciendo anuncios y hasta respondiendo ataques.
Aquí en el Estado, por ejemplo, los titulares de Educación, Seguridad Pública, el secretario de gobierno, entre otros desde luego, están al pie del cañón.
Froylán Gámez, el titular de la SEC, saliendo a los medios, informando acerca de la oportuna –ahora si- entrega de los nuevos uniformes escolares y la puesta en marcha del programa “Trucha con la escuela”, ante la soledad de los planteles en los meses de julio y las primeras tres semanas de agosto, para que los vecinos intervengan ante posibles desmanes de vándalos, que nunca faltan.
Labor especial, la del secretario de seguridad pública, Víctor Hugo Enríquez, al implantarse el “Mando Único” en San Luis Río Colorado y las primeras consecuencias locales de esa estrategia, con todo y las protestas de los municipales.
El secretario de gobierno, Adolfo Salazar Razo, teniendo que lidiar con todo eso para evitar que la comunicación se rompa, sobre todo con un presidente municipal de SLRC –Santos González Yescas-, que no oculta su rabia ante esta acción estatal, atreviéndose ayer ante los reporteros a decir que si no obedecía esa orden, podrían fincarle en el Congreso del Estado un juicio político y destituirlo a unas cuantas semanas de concluir su segundo mandato.
Total, no es tiempo de vacaciones ni para el Gobernador Durazo, ni para los integrantes de su gabinete.
Ya habrá otros tiempos, digamos, más accesibles.
SABEMOS QUE ni en los negocios ni en la política hay amigos… Lo que sí hay son intereses y a pesar de que Donald Trump ha repetido que Andrés Manuel López Obrador es su amigo, no se ha detenido para atacar ferozmente al gobierno mexicano, asegurando que está sometido por los cárteles de la droga… Si eso hace como “amigo”, imagine si no lo fuera… Con todo y eso el Presidente AMLO le envió una carta, en la que recuerda los buenos tiempos vividos entre ambos mandatarios, sobre todo aquel que se dio en la Casa Blanca, donde Trump ofreció un discurso al firmar la renovación del Tratado de Libre Comercio, utilizando frases de una extraordinaria y gran amabilidad… Esta carta contempló una “posdata”, en la que se puede leer que López Obrador le pide que “no lo mande a la chingada antes de tiempo”, porque cometió el error de creer que ya había concluido su mandato… Claro, la coloquial expresión hace referencia al nombre del rancho de AMLO en Palenque, Chiapas… El doble sentido mexicano, pues.
LO QUE NO SE sabe es si continúa trabajando ahora el titular de la Secretaría de Salud en Sonora, el peruano-mexicano José Luis Alomía, porque ante el regreso del COVID-19 y las más de 13 muertes por golpe de calor en estos meses, bien haría en entrar en comunicación con la población para informar sobre el tema y hacer las recomendaciones necesarias para evitar aumentan los casos de esas enfermedades… Repito, no sabemos si se le encuentra en su oficina o él sí se tomó unos días de descanso, lo cual tampoco es pecado alguno, aunque debió prever el relevo para efectos de comunicación… La verdad, Salud está más ausente que el “niño perdido” de la canción sinaloense.