QUIEN diga que la ríspida relación entre el actual gobierno de México con los Estados Unidos no traerá consecuencias negativas para nuestro país, está muy equivocado.
Porque si bien las y los mexicanos tenemos que abrazar a la Presidenta y defender nuestro suelo del extranjero, esta lucha se antoja –aún- desigual.
Primero López Obrador “pausó” la relación diplomática con Ken Salazar, el embajador “gringo” (tuvo mucho cuidado en dejar en claro que esa “pausa” era solo con el embajador, no con el gobierno de los EU) y ahora, Claudia Sheinbaum envió al canciller Juan Ramón de la Fuente para informar a Salazar que sus asuntos ya no se verían en palacio nacional, sino a través de la Secretaría de Relaciones exteriores.
Desde luego este “nuevo trato” llegó a oídos de la Casa Blanca, en Washington y la respuesta no esperó mucho.
Fue el mismo embajador del “Tío Sam” en nuestro país quien advirtió el gran riesgo que existe para las relaciones comerciales entre México y Estados Unidos, el que se apruebe que las y los jueces del Poder Judicial sean electos por voto popular.
“Además –declaró Salazar- el que los jueces sean elegidos por voto popular facilita la participación de cárteles de la droga en ese proceso”.
Este asunto mantiene tal trascendencia que está en juego el futuro de las relaciones diplomáticas, comerciales y de todo tipo, entre las dos naciones vecinas.
Los hechos dirán si el propósito del gobierno de Claudia Sheinbaum es romper definitivamente con sus homólogos estadounidenses, lo que pondría a México al nivel de Cuba o bien, es una estrategia para exigir de los vecinos del norte un trato más digno, como socios que son.
Los hechos dirán si el verdadero propósito es “tirarnos al piso” para acusarnos de víctimas ante “el imperio del norte”, pero incluido el afán de garantizarnos como un pueblo pobre.
Como sea, a partir de enero próximo, sea Kamala Harris o Donald Trump, estos solo verán por los intereses de su país. Uno más radical que la otra, pero el objetivo será el mismo: Seguir manteniendo a México como su patio trasero.
MANLIO Fabio Beltrones, el senador sonorense, está proponiendo que regrese la autonomía a entidades federativas y municipios para que puedan recaudar más dinero que les permita no extender tanto la mano al gobierno federal… De alguna manera, es buscar aquel desarrollo regional en base a las necesidades y decisiones de las mismas autoridades locales… La propuesta no es mala y en su momento permitió una mayor y directa atención a los problemas estatales y municipales; lamentablemente, el también exgobernador de Sonora está actuando como un salmón, nadando contra la corriente, sobre todo si en los hechos el gobierno de la “cuarta transformación” ha demostrado y continúa demostrando que uno de sus propósitos es lograr la concentración total del poder en palacio nacional.
TAL Y como se esperaba, el señor Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, ratificado como reelecto presidente del comité ejecutivo nacional del PRI, apoyó a MORENA por vez primera y lo seguirá haciendo cada vez que el partido en el poder lo requiera… En el proceso de “selección para la elección” de jueces en el año 2025, llevada a cabo por tómbola en el Senado, tanto el Partido Acción Nacional como Movimiento Ciudadano determinaron no avalar un proceso tan absurdo… Pero -¿qué tal?- once senadores del PRI comandados por “Alito” se presentaron y “legitimaron” esa práctica… Claro… He aquí una demostración del por qué, una mayoría en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TRIFE) permitió la reelección del aún dirigente del tricolor, a pesar de que su congreso y reforma de estatutos internos de ese instituto político, los hizo dentro del calendario electoral… Pero ya no es ningún secreto… INE y TRIFE obedecen al Poder Ejecutivo.
ME PASAN el “tip” de que Claudia Pavlovich busca ahora una embajada o consulado en América… Por lo pronto voltea sus ojos hacia Costa Rica, ya que la capital de este país está a solo una hora y quince minutos de vuelo a la ciudad de México… La exgobernadora de Sonora hace sus gestiones con su amiga, la secretaria de Gobernación, Rosa Isela Rodríguez… Si lo logra, difícilmente la acusarán de corrupción en el actual sexenio en Sonora.