Luego de que el pasado viernes sicarios asesinaron a balazos al joven norteamericano Nicholas Douglas en la carretera Altar-Caborca, elementos federales y estatales reforzaron operativos de búsqueda y respuesta contra los responsables en la región del desierto y se enfrentaron en un ataque armado a sicarios en Caborca, con un saldo de cuatro criminales abatidos.
Una vez más la estrategia de seguridad en Sonora respondió al enfrentarse a balazos con criminales en la región del desierto de Caborca, donde diversos grupos mantienen una ola de violencia por la disputa de esas plazas en la cual han asesinado no solo agentes policiacos y militares, sino también a civiles como víctimas colaterales por confusiones o en el fuego cruzado.
El pasado viernes, murió asesinado a balazos en la carretera Altar-Caborca el joven norteamericano Nicholas Douglas, de 30 años, en un ataque armado directo contra el auto donde viajaba desde Nogales con destino a Puerto Peñasco acompañado de su novia y suegra.
Durante un operativo conjunto entre la Secretaría de Marina y la Agencia Ministerial de Investigación Criminal, realizado en la búsqueda de los responsables del homicidio del ciudadano extranjero Nicholas Douglas, fueron abatidos cuatro presuntos generadores de violencia en Caborca, Sonora.
El enfrentamiento armado de marines y agentes ministeriales estatales contra sicarios ocurrió sobre un camino de terracería en el tramo Caborca-Altar, recibiendo las fuerzas se seguridad apoyo aéreo con un helicóptero Black Hawk para ubicar a los agresores.
Los fuertes operativos de seguridad de las fuerzas federales y estatales continúan en la región del desierto de Caborca y en San Luis Río Colorado, mismos que se reforzaron luego del acuerdo institucional del gobernador Alfonso Durazo con el titular de Seguridad Federal Omar García Harfuch, y el secretario de Marina para reducir los delitos de alto impacto y neutralizar a los generadores de violencia y grupos criminales en la región sanluisina, Sonoyta y Ciudad Obregón.
SE REDUCE LA INSEGURIDAD EN OBREGÓN, NOGALES Y HERMOSILLO
La estrategia del gobernador Alfonso Durazo en materia de seguridad está funcionado al ir bajando progresivamente los índices delictivos y la percepción de inseguridad en algunos municipios con delitos de alto impacto, como es el caso de Ciudad Obregón, donde se redujo en un 27 por ciento la percepción de inseguridad.
Según cifras del INEGI Cajeme registró una reducción del 27 por ciento en la percepción de inseguridad de sus habitantes de septiembre de 2023 a septiembre de 2024, al pasar de 92.3% a 65.4%.
De acuerdo con datos más recientes de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del INEGI registra una disminución en el índice de percepción ciudadana de inseguridad en Cajeme, Nogales y Hermosillo, como resultado de la estrategia de seguridad encabezada por el gobernador Durazo, en coordinación con los tres niveles de gobierno que integran la Mesa Estatal de Seguridad.
En el lapso de junio a septiembre de 2024, se logró una reducción de 15.8% en los índices y percepción de inseguridad de los cajemenses, registrando una disminución significativa al pasar de 81.2% a 65.4%.
Asimismo, esta estrategia ha tenido un impacto importante en el municipio de Nogales, donde la percepción de inseguridad ha disminuido del 46.3% al 41.8%, lo que refleja el compromiso continuo de las autoridades en esa región.
En Hermosillo donde se registró un brote delictivo inusual en este año, también se registró una baja en el índice delictivo y en la percepción de inseguridad con el acuerdo del gobernador Durazo y el alcalde Antonio Astiazarán para la implementación del Grupo Operativo Coordinado con el cual se ha logrado una reducción por encima del 20% los homicidios dolosos.
El gobernador Durazo ha reiterado su compromiso de continuar con la implementación de la estrategia de seguridad, así como con la reducción de hechos violentos en los distintos municipios de Sonora, con el objetivo de salvaguardar la integridad de las familias en Sonora.
SE VIOLENTAN GALLEROS FRENTE AL PALACIO DE GOBIERNO
La megamarcha de galleros en Hermosillo terminó en un acto vandálico frente al Palacio de Gobierno al derribar iracundos manifestantes las vallas de protección del inmueble, y exigir a gritos dialogar con el gobernador Durazo para que derogue la Ley de Protección y Bienestar Animal que prohíbe las peleas de gallos.
Está claro que existe una división entre los criadores de gallos de pelea pues un grupo aceptó el acuerdo con el Poder Legislativo de posponer por tres años la prohibición de las peleas de gallos como bien lo recordó en el evento el abogado de una parte de los galleros, pero hay otro grupo más radical que realizó esa marcha incongruente pues ya habían sido escuchados y atendidas sus demandas de prorrogar la vigencia de la legislación de protección animal.
En días pasados en las redes sociales trascendió que detrás de los galleros radicales podría haber intereses políticos, pues se ha visto encabezando las manifestaciones al panista padresista Javier Dagnino, quien fue candidato a diputado federal por el IV Distrito en el pasado proceso electoral, aunque el mismo personaje asegura que su participación en las marchas es por sentirse afectado por la Ley de Protección Animal. Pero la duda queda. (g_navarro_ruiz@hotmail.com)