Ciudad de México, octubre 25 de 2024.- La reforma aprobada por la mayoría oficialista que impide impugnar reformas o adhesiones a la Constitución, le quitará potestad a los estados, municipios y a la misma CNDH, dejándolos en la indefensión ante decisiones centralistas, consideró el Senador por Sonora, Manlio Fabio Beltrones.
En una álgida sesión que se prolongó por horas, el Senador por Sonora, presentó voto en contra del dictamen de reforma a los Artículos 107 y 105 y al transitorio Segundo del proyecto de decreto en materia de inimpugnabilidad de las adiciones o reformas a la Constitución Federal.
En un video grabado las primeras horas de este viernes, al concluir la sesión, el Senador por Sonora puntualizó:
“Quisiera imaginar qué va a hacer cada Congreso local ahora que reciba la reforma para su ratificación; si habrán de defender sus facultades locales o cederán su espacio a esta nueva centralización de funciones”.
Habrá que escuchar cómo justifican que afecte el pacto federal que suscribimos como origen de nuestra organización política, y cómo algunos de los congresistas federales le van a explicar a sus estados lo que aquí sucedió a estas altas horas de la noche, apuntó.
“Está claro; la finalidad de esta reforma consiste en impedir, por cualquier medio, la impugnación a reformas constitucionales, lo que erosiona los principios y valores fundantes del estado constitucional de derecho, como la división de poderes y los medios de control constitucional”, consideró el Senador Beltrones.
Dijo que esta reforma está fuera de toda oportunidad y realidad, fuera de tiempo y atenta contra el proceso democrático legal y del equilibrio de poderes que integran el Estado.
Pese a estos señalamientos hizo un reconocimiento a quienes en Comisiones Unidas suprimieron de la iniciativa un evidente retroceso que nos llevaba a tiempos ya superados en nuestro país en materia de derechos humanos.
Recordó que la redacción original del Artículo 1ero constitucional iniciado en 2009 fue producto de un trabajo de muchos años, que tuvo como fin conciliar el espíritu de nuestras leyes con las regulaciones internacionales.
Celebró que las Comisiones retiraron parte de la redacción del Artículo 105 de la iniciativa en el dictamen, como era la improcedencia de las reformas incluyendo sus procesos deliberativos, legislativo y correlativa votación, así como conservar que los asuntos que se encuentren en trámite deberán resolverse conforme a las disposiciones contenidas en el presente decreto.
Recordó que el Derecho Internacional de los Derechos Humanos surgió tras la Segunda Guerra Mundial para evitar que las normas de los Estados fueran contrarias a la dignidad de las personas. Dicho en otras palabras, surgió para evitar el derecho impuesto por regímenes autoritarios como el nazismo y el fascismo.
No en balde dijo, la reforma de 2011 la hicimos consiguiendo unanimidad en el Senado y en la Cámara de Diputados, fue un consenso que se dio durante casi tres años, entre el intercambio de minutas en ambas Cámaras, prácticas que nos llevaban a conciliar acuerdos y consensos.