De Primera Mano. Por: Francisco Javier Ruíz Quirrín
TRASCENDIÓ QUE la Fiscalía General de la República buscó y encontró un par de denuncias en contra del ahora ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Alberto Pérez Dayán e hizo circular la versión de que iría tras él.
Esto último fue más que suficiente para que este juez de la Corte se uniera a las ministras incondicionales de la “cuarta transformación” y echara abajo el grupo de ocho votos que dejaría sin validez parte de la reforma judicial, a propuesta del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá.
Ante la certeza de que no se contaría con la votación necesaria para invalidar la multimencionada reforma, la ministra presidenta Norma Piña acudió a un artículo del decreto reformador de la Ley que establece que en tratándose de controversia constitucional, se impondría una mayoría mínima de seis votos.
Sin embargo, en la votación, triunfó la opción de los ocho ministros y sus necesarios votos para validar o invalidar una reforma constitucional y fue en ese momento que se “cantó” victoria en palacio nacional y en MORENA.
La Suprema Corte, de esa manera, validó la reforma judicial, la misma que incluye el voto popular como sistema de selección de jueces, magistrados y ministros en el Poder Judicial Federal a partir del venidero 2025.
Horas antes, se dio a conocer que el coordinador de asesores de la ministra presidenta Norma Lucía Piña, -Ricardo Márquez- había sido arrestado, al refrescarse un expediente por parte de la FGR que le relaciona con Genero García Luna, de quien fue colaborador.
Al mismo tiempo, se ventiló el dato de que se podrían activarse dos denuncias contra el ministro Alberto Pérez Dayán por abuso de una mujer hace algunos ayeres.
Con el voto de este ministro a favor de las incondicionales de la “4-T” (Loretta Ortiz, Yasmín Esquivel y Lenia Batres) difícilmente se puede pensar ahora en que la persecución en su contra continuará.
Se siguió la misma estrategia que en el caso de los Yunes, que son su voto permitieron la mayoría calificada en el Senado para que pasara la reforma judicial.
Y por algo la presidenta Claudia Sheinbaum, desde fines de la semana anterior, decía en su “mañanera del pueblo” que “habría que esperar la votación de los ministros”.
Se estaba operando la “manita de cochi” a Pérez Dayán.
Y sí, es una victoria de la Presidenta. De la manera que haya sido.
Nadie se lo va a reclamar.
VALDRÍA la pena anotar un acuerdo por demás trascendente que se dio en el Pleno de la Corte ayer por la mañana… Por mayoría de votos, se validó a los partidos políticos de oposición a MORENA (PAN, PRI y MC) a promover controversias constitucionales contra la reforma judicial… Este resultado permitió establecer que en realidad, la Suprema Corte de Justicia de la Nación había “pausado” el conocer medios de impugnación contra una reforma aprobada en el Congreso de la Unión.
AL MOMENTO de redactar esta columna, Donald Trump contabilizaba una clara ventaja sobre Kamala Harris en cuanto a los votos electorales por Estado… Habrá que recordar que por el sistema electoral de los Estados Unidos, los votos ciudadanos podrían marcar una diferencia a favor de uno de los candidatos, lo que no necesariamente significa que el triunfo lo tiene en la bolsa, porque esos votos electorales son los que determinan la victoria y la derrota… Eso le sucedió a Hillary Clinton en el año 2020… Se requiere para cantar el triunfo, alcanzar la cifra mágica de 270 votos electorales… Es aún temprano y esperemos el desenvolvimiento al paso de las horas… Esto puede cambiar en cualquier momento… O reafirmar el buen inicio para Trump.