La jornada violenta en Guerrero de este miércoles dejó ocho personas asesinadas, cuatro de ellos en Coyuca de Benítez, en la Costa Grande; región que está en alerta desde el 24 de octubre tras la irrupción de un grupo armado en el municipio de Tecpan.
La violencia comenzó muy temprano. De acuerdo con el reporte policiaco, alrededor de la 5:40 de la mañana fueron hallados cuatro cadáveres con las manos y los pies amarrados, huellas de tortura e impactos de balas. Estaban sobre la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, en el puente vehicular del río de Coyuca de Benítez.
En el lugar también dejaron cartulinas con mensajes que fueron ocultados por policías y militares que resguardaron el hallazgo.
Unas 24 horas antes, alrededor de las 6 de la mañana del martes, un hombre herido por balas ingresó al hospital IMSS-Bienestar ubicado en la cabecera municipal de Coyuca de Benítez y minutos después un grupo armado ingresó y lo asesinó.
Se presume que estos hechos pueden estar vinculados con la crisis de violencia que se vive en la Costa Grande tras la irrupción del grupo armado denominado Gente Nueva de Guerrero (GNG), en la cabecera municipal de Tecpan y que ha dejado más de 34 muertos.
Ataques en región Norte
En tanto, en el municipio de Teloloapan, en la región Norte, fueron asesinadas tres personas.
Alrededor de las 2 de la mañana de este miércoles, hombres armados irrumpieron en dos casas en las colonias El Calvario y Niños Héroes y asesinaron a dos hombres.
En una de las viviendas se reportó que una de las víctimas era un excomandante del grupo autodefensa Tecampanera, de Teloloapan.
El otro asesinato ocurrió alrededor de las 8:00 horas. Un hombre fue baleado en la colonia San Andrés, cerca de la Unidad Deportiva. El hombre fue identificado como Francisco Antonio “N”, de 50 años, productor de puercos y comerciante de alimentos para ganado.
Al mediodía del miércoles hombres armados atacaron una tortillería ubicada en el mercado central.
En el ataque murió un hombre y otros dos resultaron heridos. El cadáver quedó en el sillón donde estaba sentado al momento del ataque.
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