A fin de evitar el riesgo de un brote de tuberculosis en el Cereso de Ciudad Obregón, la Comisión de Derechos Humanos emitió una medida cautelar para que las autoridades de ese Centro de Reinserción Social realicen las acciones de prevención a la salud que sean necesarias.
El presidente de la CEDH, Luis Fernando Rentería Barragán y la Cuarta Visitaduría de este organismo, dictaminaron la cautelar número 617 luego de conocer e investigar el caso de diez personas privadas de la libertad en ese centro penitenciario, quienes tuvieron contacto con otro interno enfermo de tuberculosis.
El hecho representaba un grave riesgo de propagación de contagios, afectando el derecho a la salud de todas las personas ahí privadas de la libertad.
Además de esa medida, el ombudsperson informó que la Cuarta Visitaduría también emitió las cautelares 618 y 619, ambas para que las autoridades del Cereso Uno de Hermosillo revisen la situación jurídica de dos internos que probablemente ya cumplieron su sanción y, de ser así, deben ser puestos en absoluta libertad. Así mismo, se resolvió que a uno de ellos se le brinde protecciónen en caso de que deba permanecer en el centro de reinserción social.
De igual manera, la cautelar 620 fue dirigida al Cereso Uno de Hermosillo para que brinde atención médica a una persona privada de la libertad que padece una hernia inguinal, puesto que la falta de tratamiento trastoca su derecho a la salud.
Estas medidas cautelares son parte de las 669 que se han dictado durante la presidencia de Rentería Barragán para proteger los derechos fundamentales, las cuales son cuatro veces más que todas las emitidas en treinta y dos años de historia de la Comisión Estatal de Derechos Humanos.