Esta temporada de gripe ha sido especialmente brutal, y no muestra signos de remitir.
Desde octubre, se han producido al menos 24 millones de casos en Estados Unidos. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han calculado que se han producido hasta 650.000 hospitalizaciones, lo que supondría el nivel más alto de hospitalizaciones desde 2017. En muchas partes del país se están registrando tasas de gripe “altas” o “muy altas”.
Los elevados números de casos en este momento son sorprendentes, dado que esta es la época del año en que la gripe suele empezar a disminuir, dijo Susan Russell, directora médica de la unidad de cuidados intensivos médicos del Northwestern Memorial Hospital de Chicago. Pero Russell dijo que seguía viendo en el hospital una avalancha de pacientes enfermos de gripe.
Donald Dumford, médico especialista en enfermedades infecciosas de la Clínica Cleveland, comentó: “Hace un par de semanas, yo decía: ‘Hemos tocado techo, va a empezar a bajar’”.
“Y entonces me engañaron”, añadió.
No está del todo claro por qué la actual temporada de gripe ha sido tan grave. Los médicos dijeron que las tasas de vacunación no han sido tan altas como les gustaría: aproximadamente el 46 por ciento de los niños y un porcentaje similar de adultos se han vacunado contra la gripe en lo que va de temporada, según datos preliminares de los CDC. Las vacunas antigripales reducen la probabilidad de infección, y también podrían ayudar a limitar la propagación del virus a otras personas.
Y una parte de los casos podría ser una consecuencia persistente de los cierres pandémicos, cuando la transmisión de muchos virus comunes se redujo porque la gente practicaba el distanciamiento social, dijo Russell. Es posible que nuestros sistemas inmunitarios sigan fuera de práctica tras no haber tenido que defenderse de las enfermedades respiratorias durante ese tiempo.
Algunas personas corren un alto riesgo de enfermar gravemente y desarrollar complicaciones por una infección de gripe. Entre ellas están las personas muy jóvenes o muy ancianas, o quienes padecen trastornos pulmonares o neurológicos subyacentes. Las personas con obesidad, cardiopatías o hipertensión también corren mayor riesgo de enfermedad grave, al igual que las mujeres embarazadas.
Las visitas a urgencias relacionadas con la gripe se han disparado en las últimas semanas entre los niños menores de 4 años. Las tasas de hospitalización por gripe están aumentando entre todos los grupos de edad, pero los adultos de 65 años o más están acudiendo al hospital en cifras especialmente elevadas.
Brad Uren, médico de urgencias de la Universidad de Salud de Míchigan, dijo que su propio hijo estuvo en casa enfermo de gripe esta semana. “Eso supuso una carga adicional para el cuidado de los niños”, dijo. “Pero saber que eso pudo haber evitado que algún otro niño enfermara y se llevara la enfermedad a casa, a su abuelo… por eso lo haces”.
La temporada de gripe suele terminar en mayo, lo que significa que no es demasiado tarde para vacunarse. (Solo recuerda que los anticuerpos tardan un par de semanas en hacer efecto). La vacunación puede reducir el riesgo de hospitalización por gripe y hacer que los síntomas sean menos graves.
Las precauciones de sentido común, como lavarse las manos con frecuencia o llevar mascarilla en lugares concurridos y mal ventilados, también pueden reducir el riesgo, dijeron los médicos. La gripe se propaga a través de pequeñas gotículas llenas de virus que se dispersan en el aire cuando una persona infectada habla, estornuda, tose o incluso se ríe. Esas gotículas pueden adherirse a superficies como pomos de puertas y barras de cocina, donde pueden infectar a quienes las tocan y luego se tocan la nariz, los ojos o la boca.
También debes quedarte en casa cuando no te encuentres bien, para evitar la posible propagación del virus.
Después de exponerte a la gripe, por lo general tardas de uno a cuatro días en empezar a sentirte mal. A veces las personas son contagiosas desde el día anterior a desarrollar los síntomas, que pueden incluir fiebre, escalofríos, tos y dolores de cabeza y musculares. Un episodio de gripe puede dejarte agotado, y también puede hacer que la nariz se te tape o gotee. Las personas con gripe suelen ser contagiosas durante aproximadamente una semana.
Los síntomas de la gripe pueden parecer similares a los causados por otra infección viral: la covid. Las nuevas pruebas caseras combinadas pueden ayudar a determinar qué virus tienes. Y aunque la covid sigue siendo una amenaza, Estados Unidos está experimentando la oleada invernal más leve del virus hasta la fecha. Los datos preliminares de la última semana de enero, de hecho, muestran que un porcentaje ligeramente mayor de personas puede haber muerto de gripe que de covid.
“La infección vírica dominante que estamos viendo este año es la gripe”, dijo Russell.
www.reforma.com