El gobierno mexicano ha puesto la lupa en el trasiego ilegal de rifles estilo Barrett calibre 50, utilizados por grupos del crimen organizado y que, de acuerdo con informes federales, “han generado un grave impacto en la seguridad de México”.
En un informe denominado Resultados contra el tráfico de armas en el marco de cooperación del Entendimiento Bicentenario entre México y Estados Unidos sobre Seguridad, Salud Pública y Comunidades Seguras, enviado a la Cámara de Diputados, se advierte que, del grueso de las armas incautadas en el país, las que más preocupan son las calibre 50.
Se detalla que el porcentaje de estos rifles recuperados en México, respecto al total de armas aseguradas, aumentó de 0.1% en 2011 a 3% en 2020, es decir, 30 veces más.
“Los rifles estilo Barrett calibre 50 han generado un grave impacto en la seguridad de México. Entre 2010 y febrero de 2023, las autoridades mexicanas recuperaron 831 rifles de francotirador calibre 50”, se menciona en el informe solicitado por el Congreso mexicano, a través de un punto de acuerdo.
El texto destaca que, de los 831 rifles decomisados, “519 fueron fabricados por la empresa Barrett”.
En 2021, el gobierno de México denunció a la empresa Barrett Firearms Manufacturing, Inc. como parte de un grupo de compañías de armas estadounidenses a las que se les acusa de “comercio negligente e ilícito”.
La demanda fue presentada en el Distrito de Massachusetts, Boston, en 2021. Señala que dicha empresa “auxilia e instiga” al tráfico de armas.
Las armas tipo Barrett se han convertido en las favoritas del narcotráfico. Se trata de un equipo capaz de atravesar fuertes blindajes, utilizado por francotiradores de élite de las tropas estadounidenses.
Ninguna de estas armas es fabricada en México. De acuerdo con la Secretaría de la Defensa Nacional, la mayoría proviene de armerías en Arizona y Texas.
Esta arma pesa alrededor de 14 kilogramos y es fabricada por la empresa estadounidense Barrett Firearms Company, una industria que se desempeña en el ámbito de suministros militares.
Se menciona que, como parte de la coordinación binacional entre México y Estados Unidos, el rastreo de armas recuperadas en nuestro país creció 63%, destacando a Texas, Arizona y California como los principales estados de origen del armamento traficado.
El informe puntualiza que, desde octubre de 2021 a septiembre de 2024, el aseguramiento de armas de fuego en México aumentó 65%, con un total de 53 mil, entre ellas 972 de grueso calibre, 20 millones de cartuchos y 3 mil 600 granadas. Aproximadamente 70% de las armas confiscadas en México provienen de Estados Unidos.
En lo que respecta a la administración de Claudia Sheinbaum Pardo, señala que, desde octubre de 2024 al 25 de febrero de 2025, “se han asegurado 6 mil 582 armas de fuego, un millón 345 mil 397 cartuchos y 673 granadas”.
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