Las presidentas del Instituto Nacional Electoral (INE), Guadalupe Taddei; y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Mónica Aralí Soto Fregoso, aseguraron que están sentadas las bases para que los ciudadanos puedan acudir el próximo domingo a las urnas, para votar por primera vez por jueces, ministros y magistrados del poder Judicial.
Soto Fregoso insistió en que un verdadero demócrata es quien promueve el voto como un derecho ciudadano, y advirtió que cualquier esfuerzo por bloquear su libre ejercicio es contrario a los estándares internacionales y a la vocación de la democracia.
Durante una reunión informativa con observadores internacionales, Guadalupe Taddei precisó en torno al polémico tema de los acordeones, que la ciudadanía puede llevar sus anotaciones para guiarse en el proceso de votación, para recordar los números de sus candidatos favoritos y precisó que ella lo hará así también.
“Todos los mexicanos y mexicanas sabemos cómo ir a votar. Yo estoy segura de que este primero de junio irán muchos a votar, iremos muchos a votar y, seguramente, cada uno de nosotros llevará su propio escrito por tantos números que tenemos que marcar”, precisó.
Tras advertir que quienes intenten coaccionar el voto e impedir que los electores ejerzan sus derechos estarán cometiendo delitos electorales.
Asimismo, precisó que en este proceso electoral están acreditados más de 316 mil observadores electorales, la cifra más alta desde la elección de 1994 y dejó en claro que el Instituto está satisfecho con este proceso.
En tanto, la magistrada Mónica Aralí Soto, ante visitantes extranjeros provenientes de cuarenta países que observarán la jornada electoral del próximo domingo, sostuvo que hacer una campaña para decirle a la ciudadanía que no ejerza sus derechos a votar, a opinar, a decidir, a cambiar lo que considere que se debe cambiar o a refrendar lo que considere que se debe refrendar, no es apegado a los estándares democráticos ni a la integridad electoral.
Advirtió que el TEPJF no se involucra en política y sus resoluciones están sustentadas en criterios jurídicos, y aunque sus decisiones muchas veces se politizan, siempre busca estar fuera de la política. El Tribunal añadió, cumplirá con su mandato constitucional de defender los derechos político-electorales de la ciudadanía frente a cualquier esfuerzo por denostarlos.
Consideró que la democracia no es estática, sino un proceso evolutivo, vivo, en constante movimiento, y ese movimiento lo provoca la sociedad, la ciudadanía a través del voto popular. Señaló que éste se construye y se perfecciona día con día a través del diálogo, la participación ciudadana y la adaptación a nuevos retos sociales, políticos, económicos.
En este marco, señaló la importancia y el deber de apegarse en todo momento a los preceptos de la Carta Magna, ya que “aquí no hay dudas, no hay encrucijadas, ya que el único camino es lo que la Constitución ordena“.