Antes de ser una de las conductoras más populares por su participación en La Casa de los Famosos México, Odalys Ramírez tuvo sus inicios en TV Azteca en un famoso show matutino llamado Tempranito, sin embargo a pesar de que fue su gran debut en televisión, no todo fue miel sobre hojuelas.
En entrevista con Yordi Rosado habló sin tapujos de lo difícil que fue esta etapa, especialmente porque los conductores principales: Daniel Bisogno, Ingrid Coronado y Anette Michel, le hicieron la vida imposible cuando solo tenía 17 años.
A los 17 años, sin experiencia previa como conductora y con apenas una carrera de modelaje en ascenso, se integró al programa matutino Tempranito, una producción de TV Azteca que marcaría su debut en la televisión.
Sin embargo, en lugar de recibir orientación o apoyo de sus colegas, Odalys enfrentó actitudes hostiles por parte de figuras ya consolidadas como Ingrid Coronado, Anette Michel y Daniel Bisogno.
“Ese programa me curtió porque yo realmente venía de ser modelo (…) entonces hacen casting para Tempranito y me seleccionan. Yo ahí era pues era todavía menor de edad, fíjate creo que cuando entré a Tempranito no recuerdo si tenía 16 o 17”.
La emoción por haber sido seleccionada duró poco. Con el paso del tiempo, descubrió que su ingreso respondía más a una estrategia del productor para desestabilizar al elenco principal que a un deseo genuino de integrar una nueva voz joven.
Según le contaron después, su presencia fue utilizada como una provocación para sus compañeras de cuadro, quienes ya se encontraban en desacuerdo con la producción.
“Según sé porque me lo contaron años después, el productor en ese momento de Tempranito estaba teniendo muchas diferencias con ellos porque según él a ellos se les estaba subiendo la fama a la cabeza especialmente a las mujeres (…) y entonces él dijo ‘vamos a meterles a una chavita guapa y que les empiece a hacer ruido’”.
Desde su primer día, Odalys asumió su papel con profesionalismo. A pesar de su corta edad, no esperó tratos preferenciales ni evitó el trabajo arduo. Aceptó la indicación del productor de salir a reportear, escribir sus notas, editarlas y presentarlas, todo con el objetivo de ganarse su lugar.
Sin embargo, el esfuerzo y compromiso no fueron suficientes para evitar los desplantes, miradas de desdén y un ambiente cargado de tensión.
“Me dice el productor: ‘mira es algo que nunca has hecho, yo necesito que toda la semana estés en la calle haciendo encuestas, reportajes, que vengas aquí, que escribas tus notas, que te apoyes de nuestro equipo editorial, que te metas a la sala de edición, que edites tus notas (…)’. Me pareció una estrategia perfectamente lógica; una manera de ganarme el piso básica, elemental”.
Aunque ella admiraba profundamente a Ingrid y Anette por su talento y presencia escénica, nunca logró sentirse parte del equipo. Intentó acercarse, mantenerse al margen del drama, incluso minimizó su presencia para no incomodar, pero ni eso funcionó. El rechazo era evidente y constante, sobre todo cuando su madre no estaba cerca para atestiguarlo.
“Sí, fíjate que nunca tuve yo una relación muy cercana con él porque era poco lo que platicábamos fuera del aire y pues al aire cada vez que yo intentaba hablar me interrumpían y no me dejaban entonces tampoco hablábamos mucho al aire y mi mamá yo creo que como que leyó un poco la situación y también se daba cuenta entonces siempre que yo terminaba mis participaciones como que me jalaba. No fue muy agradable porque sí en diversas ocasiones yo a veces lo veía como muy buena onda y como buen tipo y como que hasta querible y de pronto entrábamos al aire y me tiraba un comentario como despectivo, como pasivo agresivo así yo decía ‘¿Qué pedo?’”.
Odalys reflexionó que, aunque en algunos momentos Daniel le daba palabras de aliento en los cortes comerciales, su comportamiento frente a las cámaras era completamente diferente, como si se tratara de dos personas. Este tipo de doble discurso la hizo dudar de sí misma y sentirse oprimida durante sus años en Tempranito.
“O sea sí es el mismo que ahorita en el corte comercial me dijo “Muy bien niña qué bueno que te fuiste a hacer esta nota y estás trabajándole mucho ya te vi que estás todo el toda la semana aquí muy bien felicitaciones.” Y luego al aire me das un o sea pues yo era menor de edad chavita iba entrando o sea entonces sí me parece que no merecía que fueran tan duros conmigo, ni él ni nadie”.
Con el paso del tiempo, y luego de dos años en el programa, Odalys fue convocada para reemplazar a Ingrid Coronado en Sexos en guerra. Aunque nunca supo cómo tomó Ingrid ese reemplazo, para ella fue un respiro alejarse de un ambiente que sentía tóxico. Con el tiempo también aprendió a poner límites, y a no regresar a espacios donde había sido maltratada.
“No suelo volver a los lugares donde me tratan mal (…) desde bien chiquita entendí que una persona que me maltrata no es una persona que me quiere (…) si veo que no fue un resbaloncito, sino que es algo constante y ya con dolo, yo sí tengo un sistema donde apago el switch y si apago el switch, ya está”.
Años después, su esposo Pato Borghetti trabajó con Ingrid Coronado en Venga la Alegría, y fue a través de él que Odalys supo que Ingrid había reconocido que no actuaron bien con ella. Aunque nunca hubo una conversación directa entre ambas, ese acto simbólico ayudó a sanar la herida.
“Sé que en el camino él con Ingrid hicieron una buena amistad y que Ingrid tuvo una plática con él, no así conmigo, de decirle: ‘oye, fuimos muy injustos con Odalys cuando estuvo en Tempranito, y la verdad es que lo siento mucho’”.
Finalmente, sobre la reciente muerte de Daniel Bisogno, Odalys se mostró prudente. Lejos de usar el momento para revivir heridas, optó por guardar silencio por respeto a su hija, quien hoy debe enfrentar la pérdida de su padre.
“Soy de la idea que si no tienes nada bueno que decir mejor no digas y también me solidarizo y empatizo mucho con una niña que se quedó sin su papá entonces sería incapaz de salir a tirar, decir el daño que me hizo lo que no me hizo lo que sí, ya no tiene sentido ya no está, ya la vida no nos juntó de nuevo lo cual fue una etapa de mi vida. Aprendí mucho de él porque él también era un comunicador extraordinario, tenía su tipo de humor y todo, pero era un tipo brillante y a veces esa brillantez la utilizaba y la depositaba en lugares que a mí no me parecían tan padres pero realmente no o sea no te puedo decir cuando me hablaron y me dijeron ‘ay ¿qué opinas que acaba de fallecer?’ De entrada era un miércoles a las 10 de la noche me enteré en esa llamada en vivo en un programa de radio ¿qué voy a decir pues lo único que tengo que decir es que lo siento mucho porque una niña se quedó sin su papá (…) no tuve relación con él y no tengo el mejor recuerdo entonces mejor que descanse en paz y que su hija en un momento dado si está buscando en Google se encuentre que le están tirando a su papá que ya ni está”.
