Dos de los motores que hacen crecer la economía y el empleo se encuentran prácticamente detenidos: se trata del norte y sureste del País, advirtió Gerardo Esquivel, economista y ex subgobernador del Bando de México.
“Tenemos dos motores del País, el norte y el sur sureste, básicamente detenidos. Lo único que mantiene viva la actividad económica y el empleo formal, y más adelante hablaré de lo que pasó con el resto de los empleos, es el centro y el centro norte: servicios y parte de la actividad vinculada a la exportación y a la producción del sector agrícola, también importante”, manifestó en el evento “Encuentro XXXII de Ex becarias y becarios de Bolonia. Reflexiones laborales contemporánea”.
Subrayó que, en el sexenio pasado, el empleo creció muy rápido en la zona sur sureste y luego empezó a desacelerarse debido a que se terminaron las obras emblemáticas que realizó el ex Presidente Andrés Manuel López Obrador.”¿Qué ocurre en 2024? Es el fin de las obras de los proyectos prioritarios del Presidente López Obrador.
Así como se echó a andar la maquinaria para expandir la actividad económica en esa zona, con el Tren Maya, con la refinería de Dos Bocas y con el Corredor Interoceánico, se generó mucho dinamismo y formalidad. Luego comenzó la desaceleración y la contracción empieza a intensificarse”, subrayó.
Añadió que al cierre de la Administración de López Obrador se empiezan a terminar los proyectos y se va cerrando la llave de inversión, por lo que la desaceleración se vuelve más marcada.
Comentó que el estancamiento en el empleo formal está acompañado de una desaceleración en la actividad económica. O sea, ambas cosas van de la mano, explicó.
Esquivel aseguró que el año pasado prácticamente no hubo generación de empleo, pero eso se debe a un efecto estructural y no solo a las políticas del Gobierno de Estados Unidos.
“La frontera norte llegó a generar cero empleo formal hacia fines de 2024 y hoy en día está en terreno negativo. Es decir, hoy en día en la frontera norte tenemos menos empleos formales de los que teníamos hace un año. Eso no ocurrió de la noche a la mañana; no es culpa de Trump.
“Pudo haber incidido, pero es un fenómeno más estructural asociado a esa situación presente en el País desde 2022”, manifestó
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