El presidente del Órgano de Administración Judicial (OAJ), Néstor Vargas Solano, denunció que el extinto Consejo de la Judicatura Federal (CJF) heredó un déficit financiero de 14 mil millones de pesos, lo que ha comprometido la operatividad del Poder Judicial de la Federación (PJF).
Durante la presentación de su informe de labores, Vargas Solano detalló que estas irregularidades presupuestales no solo afectaron el rubro administrativo, sino que pusieron en riesgo el pago de salarios de miles de trabajadores y el mantenimiento básico de la infraestructura judicial.
“Detectamos, entre otros problemas, un déficit de recursos financieros por casi 14 mil millones de pesos; una falta grave de mantenimiento en inmuebles y en los equipos multifuncionales de impresión y escaneo, así como una falta de coordinación entre las distintas áreas del extinto CJF”, afirmó Vargas Soriano.
Faltante puso en riesgo sueldo de trabajadores del Poder Judicial
De acuerdo con declaraciones para La Jornada, la crisis financiera dejada por la administración anterior se manifiesta en cuatro ejes principales:
- Riesgo en nómina: El déficit puso en peligro el pago de la primera quincena de septiembre para 50 mil trabajadores.
- Abandono de inmuebles: Se detectaron faltas graves de mantenimiento en los edificios judiciales a nivel nacional.
- Crisis de suministros: Existe una carencia crítica de herramientas básicas para la labor jurisdiccional, tales como impresoras y escáneres.
- Procesos legales: Ante el hallazgo de estos faltantes, el OAJ ya dio vista a la Contraloría para que se inicien las investigaciones correspondientes y se deslinden responsabilidades.
“Se recibió una operación financiera con un déficit de 14 mil millones de pesos, pero gracias a las estrategias de eficiencia, se prevé iniciar el 2026 sin estas cargas financieras”, aseguró el funcionario.




