Se acerca, inexorable la cita con las urnas. Y no sé usted, ocupadísima lectora, desquehacerado lector, pero salvo contadas excepciones no se percibe un ánimo festivo en la ciudadanía, más allá de los equipos de campaña y el voto duro que suele manifestarse en reuniones, mítines y encuentros en forma de aplaudidores y matraqueros.
Toda la clase política coincide en el imperativo de acudir a ejercer ese derecho y obligación que es ejercer el voto, y matizan ese imperativo con toda suerte de arengas y elaboraciones a propósito del fortalecimiento de la vida democrática y, según sea el campo en el que se ubiquen, a detener la destrucción de las instituciones o a construir el segundo piso de la cuarta transformación.
Y suena bien todo. Pero hay serias dudas sobre si esas arengas realmente permean en un electorado que mayoritariamente aparece ausente, ya por desidia, ya por desencanto, ya porque no le llegan al precio de su voto, ya porque hay candidatos y candidatas que simple y llanamente no despiertan más entusiasmo que el que provoca una mosca zumbando en la oreja.
Realmente son excepción las campañas que atraen las miradas ciudadanas, y casi todas se concentran en la capital del estado por razones obvias que tienen que ver con el hecho de que aquí se concentra casi un tercio del padrón electoral y Hermosillo es la sede de las principales actividades económicas, académicas y desde luego, políticas.
No sé si usted coincida, pero es poco lo que se sabe de las campañas en otros municipios importantes. Salvo Guaymas y Cajeme, que también tienen lo suyo en cuanto a la disputa por el poder político, muy poco podemos apuntar de otros municipios como Navojoa, San Luis Río Colorado, Caborca, Cananea, Agua Prieta o Nogales, por citar algunos. No se diga de lo desapercibido que pasan las campañas en la región serrana o en el desierto.
Hay campañas que se perciben poderosas en cuanto al despliegue de recursos (humanos, materiales, tecnológicos y propagandísticos) como la de María Dolores del Río en Hermosillo, que ha ganado espacios mediáticos importantes por eventos masivos como el de la CTM en el CUM o el encuentro con mujeres en el Expo Forum, pero también por poner en el centro de la discusión un par de temas relacionados con presuntos actos de corrupción del alcalde con licencia Antonio Astiazarán.
La campaña de este, por cierto también tiene mucha tracción y todos los días aparece en cualquier punto de la geografía municipal demostrando que no fue en vano haber desarrollado en estos tres años un gobierno que tomó distancia de los anteriores sobre todo en materia de innovación y perspectiva ambientalista de sus políticas públicas.
En la capital destaca también la campaña de Natalia Rivera, que con mucho menos recursos está picando piedra todos los días, haciendo propuestas y lanzando retos a sus contrincantes por la alcaldía.
Pero las campañas federales, que tienen un mes más de haber iniciado, tuvieron por allí un pico cuando la fórmula del PT tomó como principal bandera una especie de ‘tírele al negro’, poniendo a Manlio Fabio Beltrones como objetivo de todo su discurso. Pero hasta eso parece haberse apagado después de que el candidato de la coalición Fuerza y Corazón por México no mordió el anzuelo y siguió de frente.
La fórmula de Morena que encabeza Lorenia Valles parece demasiado confiada en el peso de la marca y los más de 400 mil votos obtenidos por el candidato a gobernador en 2021, Alfonso Durazo Montaño. Ciertamente que tienen actividad todos los días, pero realmente se perciben a medio gas. Hay un tercer candidato al senado, Ernesto ‘El Pato’ de Lucas, de quien se esperaba más, pero ha quedado a deber.
Y de los candidatos a diputados federales, el que aparece más activo y con cierto grado de confianza también, por estar disputando un territorio que tiene muy ‘peinado’ y tiene muchos afectos porque se le recuerda bien tras su gestión como alcalde capitalino. Tiene en el distrito 05, sin embargo un rival de cuidado: Jacobo Mendoza, que no deja de recorrer el territorio y que viene muy bien arropado por la marca de Morena.
¿Pero en el resto de los distritos, desde Navojoa hasta SLRC? Francamente es poco lo que se sabe.
Esa aparente parsimonia no augura buenos dividendos en términos de participación ciudadana y entonces el imperativo de toda la clase política para llamar al voto, se pierde en la falta de propuestas novedosas, la abundancia de perfiles más bien bajos (y en algunos casos escalofriantes, como el candidato del Partido Sonorense a la alcaldía de Guaymas, Francisco Villaflor).
Todos los candidatos y candidatas, pero también las dirigencias partidistas y los diversos liderazgos sociales tendrían que imprimir un nuevo ritmo en sus campañas e incluir un apartado específico en el que se establezca como prioridad la convocatoria a las urnas.
De lo contrario, todo pinta para repetir una votación igual o más baja que la registrada en 2021, una de las menos concurridas en la historia reciente.
II
No debió caer nada bien en las filas del morenismo el anuncio de la incorporación de tres regidores de esas siglas a la campaña del candidato del PRI-PAN-PRD a la alcaldía de Hermosillo, Antonio Astiazarán.
Fue el propio alcalde con licencia quien subió a su cuenta de Twitter que los regidores Carlos Andrés Noperi Córdova (PVEM), Rafael Cruz Flores (Morena) y Araceli Berrelleza (Morena) se sumaban a su equipo, un anuncio que había hecho la noche anterior durante un evento en la plaza de una colonia de Hermosillo.
El anuncio llama la atención porque en estos tiempos lo más común es que la migración de políticos vaya desde la oposición a Morena y no a la inversa, y eso se explica porque ahí podrían encontrar mejores oportunidades de mantenerse vigentes en el servicio público; el hecho de que desde Morena se sumen al equipo del Toño, ¿tiene la misma explicación?
III
En otro orden de ideas, comienza a materializarse lo que desde hace tiempo se había venido mencionando solo como anuncios y que durante los últimos meses constituyó una de las demandas más reiteradas de la derechohabiencia en general y de la clase trabajadora en particular.
Nos referimos al déficit de médicos generales y especialistas en el sector salud, uno de los motivos más relevantes para alimentar quejas por deficiencias y tardanzas en el servicio de las instituciones.
Pues bien, ayer en la mañanera se tocó el tema y más tarde el gobernador del estado anunció que a partir del próximo 16 de mayo arribarán a Sonora 181 médicos y médicas; 136 generales y 45 especialistas que atenderán a pacientes de cinco hospitales de la entidad.
El director General del IMSS, Zoe Robledo anunció además que ya se tiene un avance del 99% en las asambleas para integrar los Comités de Salud para el Bienestar, pues de la meta establecida en 222 se han realizado 220. Estas son instancias ciudadanas que funcionan mediante un esquema similar al de La Escuela es Nuestra, que en el sector educativo asigna directamente recursos a los padres de familia para que ellos decidan en qué áreas de la mejora de planteles aplicarlos.
Con la llegada de estos médicos, se consolida en Sonora el sistema IMSS-Bienestar, del que Sonora es referente en el plano nacional.