En este proceso electoral además de estar en juego el presente para muchos personajes políticos también está el futuro pues algunitos tienen la mira puesta en la sucesión gubernamental, sobre todo en las y los candidatos de Morena, y por ello surgen ataques desde la Ciudad de México como los recibidos por la abanderada morenista a la alcaldía de Hermosillo, María Dolores del Río, a quien se le relaciona con corruptelas a su paso por la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
Según lo declarado por Eduardo Urbina, vocero del candidato a la alcaldía capitalina por un segundo período Toño Astiazarán, en el portal del periodista amlover Julio “Astillero” Hernández, se denunciaron irregularidades en compras de equipos por 20 millones de pesos en la Secretaría de Seguridad Pública estatal en tiempos de María Dolores.
Lograr que un medio nacional incluya una denuncia o filtración contra algún político o personaje público solo se hace con influencias mayores, de muy arriba, de grupos de poder, y esto pudo haber sucedido en el ataque contra María Dolores del Río, quien es la coordinadora de campaña en Hermosillo de Claudia Sheinbaum, por lo que representa un riesgo o peligro para otros candidatos y candidatas de Morena y PT, sobre todo al Senado, que ya se sienten con derecho a ocupar la silla de Palacio de Gobierno en relevo en el 2027 del gobernador Alfonso Durazo.
Solo así nos explicamos esa denuncia en el portal de Julio Astillero, principal pluma de columnistas de La Jornada, contra María Dolores del Río, donde dan santo y seña de las irregulares adquisiciones de equipo de seguridad a la empresa “Access& TI Soluciones, Accesorios y Tecnología”, a la cual pagó cerca de 6 millones de pesos en 4 contratos, pero resulta que se encontró que ese negocio estaba constituido por una vendedora ambulante y un empleado de una empresa de seguridad, además de que la ubicación de la empresa vendedora era una casa habitación y no un distribuidor autorizado.
En la publicación que hizo referencia el vocero Eduardo Urbina, cita otros contratos irregulares para la compra de uniformes, chalecos balísticos, etc. a otra empresa pagando el doble de lo que normalmente cuestan dichos artículos erogando 13 millones de pesos.
La candidata común de Morena y sus aliados a la alcaldía de Hermosillo, María Dolores del Río, tiene mucho que explicar sobre esas denuncias públicas de irregularidades publicadas por Julio Astillero y retomadas por Eduardo Urbina.
Y además, María Dolores tendrá que investigar a fondo de dónde salió el golpe o quién le envió este primer mensaje para tratar de descarrilar su campaña a la alcaldía capitalina que de ganar y con la bendición de Sheinbaum la colocaría como principal “corcholata” para la candidatura al Gobierno de Sonora, ya sea en la mini gubernatura del 2027 o en la grande del 2030.
Como vemos con ese mensaje siciliano a María Dolores del Río, en las tribus de Morena toleran que se reparta el pastel político a personajes ajenos a la izquierda clásica o tradicional pero que no se lleven la mejor tajada con todo cereza y velitas, como lo es la gubernatura de Sonora, por ello los golpes o trabas a Célida López Cárdenas y a Omar del Valle Colosio, entre otros personajes considerados arribistas en Morena.
MANTIENE STEUS LA HUELGA EN UNISON
El Steus rechazó los ofrecimientos de las autoridades universitarias para levantar la huelga en la Unison que ya va para tres semanas dejando sin clases a más de 30 mil “aguiluchos” quienes pagan los platos rotos de esa intransigencia sindical y la incapacidad de la rectora Rita Plancarte para pactar acuerdos con sus trabajadores.
Ya se había advertido que la propuesta de la rectora al Staus de impartir clases virtuales sería tomando como un agravio por el Steus por pretender boicotear su derecho laboral a la huelga.
La lideresa del Steus, Lourdes Rojas Armenta, ha denunciado ante el propio gobernador Alfonso Durazo la falta de capacidad negociadora de la rectora Rita Plancarte, quien pretende imponer ofrecimientos sin siquiera presentarlos en tiempo y forma a la dirigencia sindical ni al Consejo General de Huelga, por lo que el gobierno estatal tendrá que buscar un nuevo puente de entendimiento con los trabajadores universitarios a fin de agilizar la reapertura de la Máxima Casa de Estudios porque es extraño que una oferta equivalente a 57 millones de pesos en sueldos y prestaciones sea rechazada por el sindicato.
Ese rechazo sistemático a las propuestas de las autoridades universitarias por parte del Steus hacen sospechar que hay un posible “gato encerrado”, que el sindicato atiende a otros intereses muy ajenos a la educación, o que de plano ya la rectora Rita Plancarte no tiene nada que hacer al frente de la Unison al estallarle dos huelgas el año pasado, y una este año que ya amenaza con echar a perder el semestre. (g_navarro_ruiz@hotmail.com)