Mis Bolas Ríspidas. Por: David Parra
MÁS Y “MEJORES REFUERZOS” CHILANGOS
Y HABLANDO DE ANIMALITOS
LÁGRIMAS Y RISAS
CUAHUTEMIÑA UNIVERSITARIA
Por David Parra
LECCIÓN EFECTIVA, AUNQUE INCOMPRENSIBLE
La movilización del día de ayer en la capital sonorense fue una gran lección civil, igualmente fatua para una sociedad sonorense que, por su apatía, lejanía con sus propias causas y distanciamiento con su proceso histórico vive ausente del asunto público, por contundentemente sordo que pueda ser el mensaje que deja un suceso como el haber obligado al gobierno a desistir de imponer una nueva y caprichosa ley, por decir lo menos.
Tal vez no haya sido la mejor de las causas de nuestra distraída sociedad la oposición de la comunidad gallera a la fallida ley de protección y bienestar animal, y menos con la disonancia de posiciones que se apreciaron entre el infaltable colaboracionismo traicionero y la firmeza de los efectivamente afectados representados por Frank Rivera en la entidad y Efraín Rábago a nivel nacional, pero si con la suficiente elocuencia para una interpretación del proceso social implícito en lograr detener una ley mal diseñada y peor socializada, con todo y las simulaciones majaderas de parlamente abierto.
Desde el gobierno se intentó imponer una ocurrencia que tiene que ver con la falsa pero cierta idea, diría la Vilchis, que ostentar el poder equivale a saber ejercerlo y que tener el control del Congreso significa tener a la sociedad en un puño. Pues sí, pero no al menos en esta ocasión.
La ciudadanía mexicana invariablemente va a reaccionar cuando le peguen en el bolsillo, como fuera el caso de esta reacción de los directamente afectados, y como bien lo leyera el caro farsante de Macuspana en su campaña de más de 20 años, esa misma ciudadanía se va a apoltronar cuando le caiga algo en el bolsillo, por mísero que sea para dejar hacer y dejar pasar cuanta ocurrencia y abuso venga de su maiceador, en tanto crea o ignore que le afecte.
La muestra para que no, aunque si por lo pronto, ahí está y a fin de cuentas es la misma fórmula que aplicaron los cuatroteros de morena y sus secuaces para asaltar el poder, lo cual aún permanece vigente en tanto nos vemos en las mismas que Venezuela o Cuba al paso que llevan los actuales traidores a la patria en su mezquino afán filibustero.
MÁS Y “MEJORES REFUERZOS” CHILANGOS
Mauricio Ibarra Romo no pudo haber llegado a Sonora de manera menos trompicada a ocupar, ni más ni menos, que la hasta ahora llamativamente acéfala fiscalía anticorrupción, luego de haber pasado, aunque sea de ladito por SEGALMEX, como afanosamente anda tratando de explicar para desmarcarse con un rotundamente escaso éxito.
Y es que el simple hecho de que haya estado en esa dependencia, más allá de su actuación o no en este saqueo donde, pese a toda la evidencia con la que Ignacio Ovalle resultó evidenciado como el responsable del robo de más de 20,000 millones de pesos y que para nada se le responsabilice, esto coloca a cualquiera que tenga que ver con este mega atraco, políticamente desperdiciado y hasta sospechosamente consentido por la mal llamada oposición, fuera de cualquier posibilidad de ser considerado, ya no digo en esa posición, “si viviéramos en un estado de derecho” como diría el innombrable traidor, sino en cualquier cargo de gobierno para el resto de sus días.
Por el lado de mi tío poncho resultaría solidariamente y magnánimamente viable pensar que al gobernador de Sonora se le está imponiendo este perfil por recomendaciones o instrucciones que bien pueden venir desde la recóndita e inexpugnable chingada o desde la mismísima y poderosa silla presidencial, que no es lo mismo, pero dicen que es igual.
Haiga sido como haiga sido resultaría lo de menos, pero el escarnio público bajo el cual esta designación está colocando a mi tío Poncho nuevamente en el plano nacional e inmediatamente después de la indecorosa reculada con una polémicamente preferente iniciativa legislativa fallida, no es como para presumir reclutar extranjeros, si acaso obligadamente por obediencia, de esa que hace rechinar los dientes
Esperemos sea el caso, ya de consuelo ante el obeso y enorme oso grizzli que esto representa.
Regionalísticamente hablando, por último, entendemos más no compartimos que por la necesidad por parte del gobierno de Sonora por mejorar su funcionamiento, puede incluso traer refuerzos en sus áreas sensibles, pero independientemente de si este funcionario poco o nada tuvo que ver con el desfalco para propios y extraños, por mala fortuna para él, Juan se llama y, además, viene de Polanco, habiendo tanto talento local.
Y HABLANDO DE ANIMALITOS
Dicen que para que la cuña apriete debe ser del mismo palo, pero francamente tengo mis dudas más que razonables con respecto de la asignación del tema de la negociación legislativa con los Galleros echando por delante, luego de darle las gracias al tocayo Figueroa por el bomberazo para bien de la simpática Ernestina, con un presunto diputado conocido irónicamente como “el pollo Castelo”… Desde ahí empezamos mal.
Este singular personaje que por razones o más bien pretextos que retan al entendimiento humano, resultó reelecto por Cajeme, presuntamente en representación de los KGmensos, como diría el más KGmenso de todos, también reelecto en el cada vez más pacífico reducto romántico donde el más chico gana su tostón, ahora vendiendo cristal.
El personaje en mención resulta pues una figura que de entrada llama a la hilaridad amalgamada ferreámente con una buena dosis de incredulidad, así que podemos anticipar sin presumir de ser consumados pitonisos que acaban de soltar al chivo en la cristalería de los bravos galleros, que no están para lidiar con pollos más que para rostizarlos, a menos que este transformer sea uno de los propios afectados, lo cual no resultaría extraño.
LÁGRIMAS Y RISAS
Sí en Harvard la cuatrotera reforma judicial está causando hilaridad, acá en México no es cosa de risa ni de juego, como dijera compungido el coyote del chiste, sino de llanto amargo para una sociedad mexicana que para efectos de los alcances de esta marranada política, cobijará por igual a quienes no estamos de acuerdo junto con los que la están avalando, a excepción por supuesto de los integrantes de la clase política cuatrotera quienes, mientras les dure el raite, se verán eximidos de ellos.
Y ya no digo que somos hazmerreír de una universidad gabacha, sino del resto del mundo que está presenciando atónito, como la miseria política de morena y sus secuaces del verde y el PT de manera fraudulenta se están apropiando de una república que con todo y sus defectos odiosos, solía ser mucho menos despreciable que lo que está resultando para rematar con la ironía, que también provoca lágrimas y risas, con la que reconocemos a regañadientes la frase aquella, que éramos felices cual síndrome de Estocolmo con los prianistas, pero no lo sabíamos.
Esto no es un asunto de diferencias ideológicas al final del día pues, sino de grados de mezquindad y la recua carroñera en turno, los está haciendo ver como niños de pecho mis despreciables prianistas, ¡¡¡pónganse las pilas!!!
CUAHUTEMIÑA UNIVERSITARIA
A veces el tema no es si las cosas son legales, sino coherentes por lo menos, y esta breve reflexión a cuento por la intención manifiesta del actual dirigente del sindicato de trabajadores académicos de la Universidad de Sonora por competir, en primera instancia, por ser electo para encabezar lo que parece ser una expresión o instancia universitaria llamada “unidad alternativa universitaria.”
Normalmente se concibe la investidura sindical como la de un ente naturalmente antagónico a la investidura administrativa que representa la rectoría, dados sus respectivos roles; el primero por desentrañar y gestionar para sus huestes los guardaditos presupuestales del changarro de enfrente, procurando la mejora social de sus representados y el segundo por esconderlos, escatimarlos o contenerlos, en tanto se sirve con la cuchara grande con su runfla de acompañamiento, por lo que no es sencillo digerir tal cambio de rol que, inevitablemente, transformaría al exigente sindicalista en el muro de contención para las aspiraciones laborales de los propios sindicalistas a los que hoy representa su dirigente en el STAUS, Cuauhtémoc González, Mismos a los que apuesta para su eventual ascenso y consecuentemente inevitable transformación moral.
Insistiría en reafirmar que no es un asunto de si este otro “cuahu” también cuatrotero pero local, casi tan panzón como el ex americanista tiene derecho o no a aspirar a la rectoría, sino de la sepsis moral que significa el pasar de borracho a cantinero bajo cualquier circunstancia… Algo así como los chapulines que hoy por hoy en el congreso local son objeto de desprecio y escarnio público, eso sí, bien recompensados por sus deslices políticamente inmorales, lo cual no deja de ser atractivo, incluso para el cuahu del STAUS.
Agradezco lo que resulte en @dparra001 vía tweeter o en En3y2 vía Facebook, sayonara.
