La mejor carta de Movimiento Ciudadano entró al juego por la alcaldía de Hermosillo en un movimiento no tan sorpresivo como interesante, pues vendrá a imprimir una nueva dinámica en esta contienda que hasta ayer aparecía solo con dos jugadores disputándose el municipio que contiene casi un tercio de la lista nominal en el estado.
Natalia Rivera Grijalva es, por donde quiera que se le vea, una rival a la que Antonio Astiazarán y María Dolores del Río, los candidatos de las dos grandes coaliciones en disputa hubieran preferido no enfrentar.
Entra además en una coyuntura por demás atractiva para quienes gustan del análisis y la prospectiva.
La contienda 2021 se definió entre los dos grandes bloques que conforman la coalición que encabeza Morena y la que integran PRI, PAN y PRD, apenas por unos cuatro mil votos; Movimiento Ciudadano, que llevó como candidato a David Figueroa Ortega sumó más de 40 mil votos, aún lejos del umbral de los cien mil en el que se decide la victoria, pero como partido emergente mostró músculo y competitividad.
Una candidata como Natalia Rivera, joven y experimentada, con una trayectoria limpia en el servicio público y protagonista central de la actual legislatura local en la que destacó como la diputada más productiva y propositiva puede meterse seriamente a la contienda, terciando la votación y apostando al tercio mayor.
No es una empresa fácil, claro. Antonio Astiazarán es un candidato muy consistente, avalado por un trabajo innovador y de resultados y llega muy bien acuerpado por la coalición PRI-PAN-PRD que en 2021 obtuvo 106 mil 116 votos en condiciones tan adversas como pueden derivar de una contienda en la que se disputaba la gubernatura y la ola guinda de Morena arrasó en el resto de los municipios de más de cien mil habitantes en Sonora.
Morena por su parte decidió ir solo en aquella contienda llevando a Célida López como candidata a la reelección. Obtuvo 101 mil 899 votos y todavía lamentan no haber concretado la candidatura común o la coalición con el PT y el Verde, que en conjunto obtuvieron más de 13 mil votos, suficientes para haberse alzado con la victoria.
El ‘hubiera’, como se sabe, no existe. Morena perdió la capital y el Toño Astiazarán se dedicó a gobernar con la mira siempre puesta en la reelección; Movimiento Ciudadano retomó su trabajo de reorganización y posicionamiento a partir de llamativas campañas publicitarias que ya lo ubican como una marca competitiva.
La campaña por la alcaldía no la gana o la pierde solo el candidato o la candidata. En el juego entran también los candidatos a las seis diputaciones locales y las dos federales y los dos principales bandos llevan personajes algunos ya probados en contiendas, otros de reciente incursión, que van a disputar con todo los territorios en disputa.
Se esperan campañas muy frontales, plagadas de descalificaciones y no exentas de golpes bajos, denuestos y piquetes de ojos. Por allí se puede colar un perfil como el de Rivera Grijalva, mesurado y propositivo.
Natalia no llega sola. Aunque aún no deciden la totalidad de candidatos que la acompañarán, es previsible que se mantengan en la dinámica de MC, de postular perfiles ciudadanos que podrían refrescar la contienda y sumarle los votos necesarios para acercarse a ese escenario de tres tercios.
Vale decir que la candidata de MC no se ha dormido en sus laureles en estos tres años y desde su función como legisladora ha recorrido permanentemente la ciudad privilegiando el contacto con la ciudadanía.
No trae el desgaste natural de un alcalde en funciones, ni la carga negativa de una candidata muy acuerpada en la marca guinda, pero de no muy gratos recuerdos a su paso por la alcaldía en 2003-2006 y más recientemente como secretaria de Seguridad Pública.
Natalia Rivera es una mujer muy preparada, con un bagaje cultural amplio y con suficiente experiencia en el ámbito de la política y el servicio público. Será una rival formidable en los debates y a la hora de hacer una campaña de propuestas.
Enfrentará, eso sí, una diferencia muy notable en cuanto a la disposición de recursos económicos, materiales y humanos, pero si algo ha caracterizado a MC es la creatividad de sus campañas y la facilidad para llegarle a la ciudadanía.
Subráyese que no será una contienda fácil y antes bien, la candidata de MC tendrá que ir cuesta arriba, pero conociéndola, garantiza intensidades políticas que podrían derivar en sorpresas.
II
En otro orden de ideas, lamentable la incorporación de Sonora a la lista de entidades donde las balas del crimen organizado ya alcanzaron a personas involucradas de una u otra manera en el proceso electoral.
El atentado que sufrieron militantes y simpatizantes de MC en Sonoyta, cuando sicarios de uno de los cárteles que se disputan aquella plaza abrieron fuego contra la camioneta en que se regresaban de un evento proselitista. Los sicarios les marcaron el alto en uno de los retenes que suelen instalar inopinadamente en cualquier parte de las carreteras de aquella zona. Al no detenerse, abrieron fuego.
El resultado fue la muerte del maestro Gustavo Adolfo Morales y en el atentado resultaron cuatro personas más heridas, entre las que se cuenta la síndica municipal de Sonoyta, Raquel López Celaya.
La Fiscalía estatal informó que a raíz de este suceso se desplegó un operativo de búsqueda de los responsables y que actualmente hay cinco presuntos detenidos, a quienes se les encontraron diversas armas. La fiscalía también mencionó que el atentado pudo tener como origen una confusión de los sicarios que dispararon contra las víctimas pensando que se trataba de un grupo rival.
La zona del desierto de Altar sigue siendo una de las más ‘calientes’ del estado.
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