Cd. de México.- El legendario Ozzy Osbourne está decidido a dar su última reverencia en grande, pero su despedida no solo tiene que ver con la música, sino con un profundo deseo personal.
El próximo 5 de julio, Osbourne se reunirá con los miembros originales de Black Sabbath en un concierto histórico en Villa Park, Birmingham, que marcará el cierre de su carrera en los escenarios. Sin embargo, más allá de la emoción que genera su despedida en el escenario, Osbourne compartió un mensaje profundamente personal que refleja su cambio de prioridades.Tras más de 50 años de gira y vida de estrella de rock, el músico, de 76 años, dejó claro que ya no desea seguir con la rutina de conciertos, hoteles y viajes.
“No quiero morir en una habitación de hotel en algún lugar”, dijo en entrevista con The Guardian.
Osbourne explicó que la decisión de retirarse definitivamente de los escenarios se basa en una necesidad personal de estar cerca de sus seres queridos.
“Es hora de pasar tiempo con mis nietos. Ya no fumo marihuana, ni sigo el estilo de vida de una estrella de rock. Soy más hogareño. Nunca salgo. Nunca voy a bares”, reflexionó, dejando claro que ya no está dispuesto a seguir viviendo una vida errante.
Aunque su salud, marcada por el Parkinson y otros problemas médicos, ha sido un factor importante en su decisión, Ozzy expresó que lo que más le importa ahora es disfrutar de los momentos con su familia, sin las exigencias de la carretera.
“Viví en la carretera durante más de 50 años. Ya no llevo el estilo de vida de una estrella de rock. Es hora de estar en casa, con mi familia”, aseveró.
A pesar de los retos físicos, Osbourne está decidido a dar lo mejor de sí en el concierto Back to the Beginning, que contará con la participación de otras leyendas del metal y recaudará fondos para organizaciones benéficas.
“No quiero que la gente piense que los estamos timando”, comentó, al explicar que la actuación será más simbólica, con una participación limitada de cada miembro de la banda.
Para el músico, este evento no solo representa un adiós al escenario, sino una reafirmación de su legado y un paso hacia una nueva etapa de su vida.
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