La cantante Taylor Swift ha sido formalmente citada como testigo en la disputa legal entre la actriz Blake Lively y el actor-director Justin Baldoni, relacionada con el rodaje de la película Romper el círculo, adaptación del bestseller de Colleen Hoover. El equipo legal de Baldoni incluyó a Swift en la lista de personas relevantes para el caso, pese a que la artista niega haber tenido participación alguna en el proyecto más allá de autorizar una de sus canciones para la banda sonora.
La noticia fue confirmada este 9 de mayo por medios estadounidenses, quienes reportaron que la citación fue emitida en el marco de una demanda por difamación interpuesta por Baldoni contra Lively y su esposo, el actor Ryan Reynolds. El protagonista de Jane The Virgin acusa a la pareja de intentar sabotear su carrera mediante presiones indebidas y declaraciones falsas durante la producción del filme.
En los documentos presentados ante el tribunal, Baldoni hace referencia a una reunión en el penthouse de la pareja en Nueva York, donde asegura que fue presionado para aceptar modificaciones en el guion propuestas por Lively. Aunque Taylor Swift no es mencionada explícitamente por nombre, Baldoni señala que una “megacelebridad” amiga de la pareja elogió las ideas de la actriz, lo cual él interpretó como una forma indirecta de coerción creativa.
Además, el director citó un mensaje posterior de Lively en el que la actriz habría escrito: “Mis dragones también protegen a aquellos por los que lucho”, en alusión a su círculo de amistades y haciendo un guiño a Game of Thrones, lo que —según Baldoni— reforzaba la presión ejercida.
En respuesta a la citación, el equipo de representantes de Taylor Swift negó cualquier implicación en el conflicto, asegurando que la artista nunca participó en decisiones creativas ni estuvo presente en el set de filmación. “Taylor Swift no estuvo involucrada en el desarrollo ni producción de Romper el círculo”, afirmaron en un comunicado, subrayando que su único vínculo con el proyecto fue autorizar el uso de su canción My Tears Ricochet, como parte de una lista de 20 artistas musicales.
La declaración oficial también acusó a los involucrados en el juicio de utilizar el nombre de Swift para atraer atención mediática: “Esta citación parece diseñada para generar clickbaits utilizando la imagen pública de Taylor Swift”.
El trasfondo de esta controversia legal también pone en foco la estrecha amistad entre Taylor Swift y Blake Lively, quienes mantienen una relación cercana desde hace más de una década. Swift es incluso madrina de los hijos de la actriz y Ryan Reynolds. No obstante, de acuerdo con información revelada por People en abril, la conexión entre ambas habría sufrido tensiones temporales a raíz del conflicto.
Fuentes citadas por el medio señalaron que la cantante se sintió utilizada en el contexto del rodaje, pero que el malentendido fue resuelto posteriormente. “Taylor estaba dolida por la situación, pero se siente aliviada de haber podido superarlo con Blake”, indicó el informante. Por su parte, Lively habría confiado en que su amistad no se vería afectada permanentemente.
La película Romper el círculo, centro del litigio, se estrenó recientemente en salas comerciales, sin que hasta ahora se haya visto afectada directamente por el proceso judicial en curso.
