La interacción con los medios tradicionales, como la televisión, la prensa escrita y los sitios web de noticias, continúa disminuyendo, al tiempo que va en aumento la dependencia hacia las redes sociales y los “influencers” para consumir noticias, reveló el Digital News Report 2025 (DNR).
Sin embargo, en el caso de México, no todo está perdido para las marcas periodísticas y los informadores profesionales, ya que según el reporte elaborado por el Instituto Reuters y la Universidad de Oxford, las plataformas digitales siguen siendo consideradas las mayores generadoras de información falsa.
En tanto, los sitios web de los medios tradicionales siguen siendo una de las principales referencias para que los usuarios de redes verifiquen la autenticidad de las noticias que circulan por Facebook, TikTok y YouTube, que son vistas como las mayores propagadoras de desinformación.
“Los influencers, las personalidades y las celebridades que comparten noticias a través de las redes sociales poseen grandes audiencias y tienen interacciones masivas, pero no cuentan con la credibilidad que sí la tienen las marcas periodísticas y los periodistas profesionales”, dijo María Elena Gutiérrez Rentería, responsable del capítulo México del Digital News Report.
“Un dato que vale la pena destacar es que los jóvenes mexicanos de entre 18 y 24 primerobuscan noticias de marcas periodísticas y periodistas, seguidos de medios nativos digitales y hasta el tercer lugar están los creadores de contenido”, añadió Gutiérrez, quien recomendó a los medios tradicionales aprender los lenguajes, la cercanía y la forma de hacer comunidad de los influencers, sin perder su rigor profesional y su ética.
Lucha por las audiencias
El Digital News Report 2025 destaca que México enfrenta un contexto polarizado en el consumo de noticias, profundamente influenciado por las secuelas de las elecciones presidenciales de 2024.
La cobertura política —centrada en la figura de Claudia Sheinbaum y su cercanía con el expresidente Andrés Manuel López Obrador— ha provocado tensiones entre los medios tradicionales, las audiencias y el gobierno.
A pesar de la disminución en la confianza general en las noticias (-2 puntos), el uso de redes sociales para informarse sigue en aumento. Facebook lleva la delantera entre los usuarios mexicanos (52 por ciento de los 2,010 entrevistados dijo informarse a través de esta red), seguido de YouTube (35 por ciento), WhatsApp (28 por ciento), TikTok (24 por ciento), Instagram (15 por ciento) y X (15 por ciento).
El análisis refiere que El Sol de México está entre los 10 medios de comunicación offline (televisión, radio y prensa) más consultados por los mexicanos. Del mismo modo, el concepto “sitios de noticias de diarios locales y regionales” se encuentra entre los 10 medios online más consultados en el país, donde se ubican varios de los periódicos locales de la Organización Editorial Mexicana.
El informe subraya que, aunque las grandes televisoras como Televisa y TV Azteca siguen siendo omnipresentes, su credibilidad está en entredicho. En contraste, medios nativos digitales como Animal Político, Aristegui Noticias y Sin Embargo registran mayor interacción y confianza entre sectores críticos del gobierno. Incluso espacios de “periodismo alternativo” como Latinus o Chamuco TV han cobrado relevancia por ofrecer visiones o contrarias o muy pegadas al oficialismo, aunque también han sido cuestionados por su transparencia financiera y filiación política.
Otro hallazgo notable del estudio es el fenómeno de la politización del consumo noticioso. En el México actual, el medio por el que se informa una persona puede ser leído como un marcador ideológico. Esta hipersegmentación, amplificada por algoritmos y cámaras de eco digitales, hace más difícil la construcción de consensos informativos. A pesar de los desafíos, el informe también destaca oportunidades. Las audiencias jóvenes en México se están apropiando del entorno digital con creatividad, impulsando nuevas formas de narrar y consumir la actualidad.
En este terreno, el video corto, los formatos interactivos y la presencia de “influencers periodísticos” están redefiniendo el concepto de credibilidad. En plena transformación digital, señala el informe, el reto no es sólo adaptarse a nuevas plataformas, sino reconstruir la confianza desde la integridad editorial y la transparencia narrativa.
Tendencias globales
- En algunos países, las personalidades y los influencers desempeñan un papel importante en la configuración de los debates públicos. Son los casos de Joe Rogan en Estados Unidos, Hugo Travers en Francia y Manuel Pedrero en México.
- A escala global, un tercio de los entrevistados utiliza Facebook (36%) y YouTube (30%) para noticias cada semana. Instagram (19%) y WhatsApp (19%) son utilizados por aproximadamente una quinta parte, mientras que TikTok (16%) se mantiene por delante de X (12%).
- Los cambios en las estrategias de las plataformas implican que el video sigue cobrando importancia como fuente de noticias. En todos los mercados, la proporción de quienes consumen video en redes sociales ha aumentado del 52% en 2020 al 65% en 2025.
- La encuesta también muestra la importancia de los podcast de noticias para llegar a un público más joven y con mayor nivel educativo.
- TikTok es la red social y de video de más rápido crecimiento, sumando 4 puntos porcentuales adicionales en los mercados de noticias y alcanzando el 49% en Tailandia y el 40% en Malasia.
- 58% de los encuestados afirma seguir preocupado por su capacidad para distinguir la verdad de la falsedad en lo que respecta a las noticias en línea. En Estados Unidos, el indicador llega a 73%.
- En cuanto a las fuentes subyacentes de información falsa o engañosa, los influencers y personalidades en línea se consideran la mayor amenaza a nivel mundial (47%), junto con los políticos nacionales (47%).
- Los chatbots y las interfaces de IA emergen como fuente de noticias a medida que los motores de búsqueda y otras plataformas integran noticias en tiempo real. Las cifras siguen siendo relativamente bajas en general (7% de uso para noticias cada semana), pero mucho más altas entre los menores de 25 años (15%).
- La confianza general en las noticias (40%) se ha mantenido estable por tercer año consecutivo, aunque todavía es cuatro puntos inferior en general a la registrada en el punto álgido de la pandemia del coronavirus.