La empresa SuKarne aceptó no introducir nuevamente ganado proveniente de Nicaragua al estado de Durango, luego de un embarque de más de cuatro mil cabezas que llegó al municipio de Tlahualilo.
Rogelio Soto, dirigente de la Unión Regional Ganadera de Durango, dijo que 4 mil 665 cabezas de Nicaragua entraron al establo de engorda de la empresa SuKarne en el municipio de Tlahualilo, y aunque era ganado inspeccionado, dijo que buscan no poner en riesgo el estatus sanitario del estado exportador, pues se esperaba un nuevo embarque de más de 5 mil cabezas.
“El riesgo no era tanto. Nos aseguran, nos daban la certeza que ese ganado que se embarcó en Nicaragua venía mejor inspeccionado, con menor riesgo, que el ganado que pudiera cruzar por el sur. Lo inapropiado era, que se introdujera a un estado que está luchando por exportar su ganado y que no fuera a ser bien visto ante los ojos de Aphis (Servicio de Inspección Sanitaria de Animales y Plantas) y USDA (Departamento de Agricultura de Estados Unidos”, comentó Soto.
En su cuenta de X, el gobernador de Durango, Esteban Villegas, reconoció la disposición de SuKarne de no recibir animales provenientes de Centroamérica al estado, ni en ningún estado con estatus de exportación. “Con diálogo y coordinación fortalecemos la confianza entre productores, empresas y gobiernos. La sanidad, la calidad y el prestigio de nuestra ganadería seguirán siendo prioridad”, escribió el mandatario.
La empresa había señalado que el ganado importado desde Nicaragua, cumple con todos los requisitos legales y sanitarios establecidos por autoridades mexicanas, y que seguirían apoyando a los productores nacionales.
El presidente de los ganaderos en Durango dijo que la estrategia es que no vuelva a ocurrir y que dirijan el ganado a engordas que tenga la empresa en otros estados donde no pongan en riesgo el estatus sanitario y la negociación permanente con autoridades de Estados Unidos para la exportación del ganado.
El Esteban Villegas también pidió a las grandes empresas que prioricen la compra de ganado local, ante el cierre de la frontera para exportación y la amenaza del gusano barrenador que afecta a otras regiones del país.
Rogelio Soto, de la Unión Regional Ganadera dijo que se espera que con el cierre de fronteras, el estado deje de exportar alrededor de 192 mil cabezas de ganado, lo que significarían pérdidas de 2 mil 500 millones de pesos.
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