Expresiones. Por: Gaspar Navarro
La fiscalía estatal busca determinar si existieron omisiones en supervisión, permisos y medidas de seguridad por parte de funcionarios estatales y municipales, así como responsables de la tienda Waldo’s por la explosión de un generador de luz que dejó un saldo de 23 muertos y 15 lesionados.
En días pasados el secretario de Gobierno, Adolfo Salazar del Razo, reconoció que la tienda Waldo’s de Hermosillo donde se registró la tragedia laboraba desde el 2021 con un dictamen negativo de Protección Civil, por lo que la fiscalía estatal solicitó la comparecencia de ejecutivos, gerentes de la empresa y de diversos servidores públicos relacionados con la operación del negocio siniestrado.
El fiscal estatal subrayó que en las declaraciones se buscará que las personas relacionadas aclaren “las circunstancias, características y condiciones por las cuales el establecimiento estaba funcionando”.
En la investigación de la fiscalía a cargo de Gustavo Rómulo Salas Chávez, también incluye a la CFE por la operación del transformador dentro de la tienda Waldo’s así como a responsables de la empresa con el fin de acreditar la legal operación del establecimiento, sus permisos municipales y su cobertura de seguro.
En redes sociales trascendió que la investigación alcanzaría al ex titular de Protección Civil del sexenio pasado Carlos Jesús Arias, y al responsable de esa dependencia en este gobierno Juan González Alvarado, ahora delegado federal de Sader en Sonora, y al actual titular de Protección Civil estatal Carlos Castañeda, y hasta salpicaría al gobierno municipal por la entrega de la licencia de operación, por lo que solicitó al Ayuntamiento de Hermosillo los reportes de visitas de inspección y verificaciones previas al siniestro.
“Estamos requiriendo la comparecencia de ejecutivos, gerentes y diversos servidores públicos. Una vez que contemos con toda la información, podremos determinar las figuras delictivas correspondientes”, precisó el fiscal estatal Salas Chávez.
En la tienda siniestrada no había ni protocolos de seguridad para el personal y clientes, aunado a la ubicación cerca de la puerta principal del transformador o convertidor de la energía eléctrica, el cual explotó causando un incendio que evitó la salida de las personas del local causando la muerte y lesiones por quemaduras e inhalación de humo tóxico. Obvio que no contaba con puertas de salida de emergencia al estar la tienda encajonada en un local sin acceso a la calle trasera o por un lado.
Waldo’s era una ratonera, al igual que muchos locales del centro comercial de Hermosillo, los cuales en su mayoría carecen de permisos de operación otorgados por Protección Civil municipal y estatal.
En Sonora, Waldo’s tiene 68 establecimientos en varios municipios, los que por orden de la Fiscalía Estatal, fueron suspendidas sus operaciones para realizar una verificación e inspección de las condiciones de seguridad de cada una ya que se presume que al igual que la sucursal de Hermosillo tengan el mismo patrón de irregular suministro y transformación de energía eléctrica y carecer de puertas de salidas de emergencia, entre otras fallas de operación, por lo que se reabre la herida y familiares de la estancia infantil convocan a una marcha el próximo 5 de noviembre para reclamar justicia para las 23 víctimas mortales, las personas heridas y exigir castigo para todos los responsables del siniestro.
La tragedia en Sonora no es nueva. Recordamos con tristeza el incendio de la Guardería ABC en Hermosillo, que dejó 43 niños muertos y un centenar de lesionados hace 16 años, sin que aprendamos la lección al persistir los mismos vicios en ausencia de aplicar leyes y reglamentos de Protección Civil en negocios, centros habitacionales, etc.
En el 2023, un incendio causó la muerte de siete muertos y varios lesionados en el antro Beer House en San Luis Río Colorado, siendo detenida una persona como causante del siniestro, pero la fiscalía estatal a pesar de que prometió investigar y aplicar sanciones por permitir operar sin permisos de Protección Civil ni tener puertas de emergencia ese negocio de diversión no hubo mayor información, y el caso quedó como una sangrienta anécdota más.
Por instrucción del gobernador Alfonso Durazo, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) brinda acompañamiento psicológico y jurídico a los afectados. Además, la presidenta Claudia Sheinbaum y la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, expresaron su respaldo a las familias y apoyarán la gestión de pasaportes y visas para el traslado de la paciente a Estados Unidos.
A su vez, el alcalde capitalino Antonio Astiazarán reiteró su solidaridad y apoyo con los familiares de las víctimas, y realizó un recorrido por hospitales para supervisar la salud de los lesionados por el incendio de la tienda Waldo’s.
De igual forma, el alcalde Astiazarán por el luto de las familias sonorenses, ordenó la cancelación del Festival del Globo que estaba programado para este fin de semana en nuestra capital.
A través de un comunicado oficial, el Gobierno Municipal expresó su solidaridad con las víctimas y sus familias, señalando que esta decisión responde al compromiso de actuar con sensibilidad y empatía ante el duelo que vive la comunidad hermosillense.
Asimismo, se informó que el DIF Hermosillo continuará brindando acompañamiento a las personas afectadas, así como apoyo psicológico y emocional a quienes lo requieran, en coordinación con las instituciones correspondientes, con el objetivo de garantizar una atención integral a las familias.
Siguiendo el ejemplo del alcalde Toño Astiazarán, para demostrar empatía con los deudos el Club de Beisbol Naranjeros de Hermosillo, debería de cancelar la serie de juegos programados para iniciar este martes contra los Algodoneros de Guasave en el Estadio de Beisbol “Fernando Valenzuela”. La Codeson o el gobierno municipal debería de recomendar prudencia y empatía al Club de Beisbol Naranjeros en estos momentos de duelo y luto de la sociedad sonorense. (g_navarro_ruiz@hotmail.com)




