La junta de accionistas de Tesla aprobó pagar al consejero delegado de la compañía, Elon Musk, la cifra récord de 1,000,000,000,000 (1 billón) de dólares en acciones, lo que le permitirá controlar el fabricante de automóviles eléctricos y le convertiría en el primer billonario del planeta.
La propuesta fue aprobada por algo más de un 75% del accionariado a pesar de la oposición de algunos de los principales accionistas institucionales.
El consejo de administración de Tesla, que ha sido acusado en el pasado de falta de independencia, permitió a Musk, que controla en estos momentos el 15% de las acciones, votar la propuesta.
En los últimos días, los directores de Tesla montaron una campaña a favor de Musk y la presidenta del consejo de administración, Robyn Denholm, advirtió a los accionistas que Musk podría abandonar la empresa si no se le concedía el billón de dólares en acciones.
La propuesta aprobada establece compensar a Musk por cada uno de los 12 objetivos establecidos y que, en conjunto, implicará la entrega de opciones sobre acciones valoradas en estos momentos en un billón de dólares.
De alcanzar todos los objetivos, Musk pasaría a tener más del 25% del accionariado de la compañía, lo que le daría la capacidad de controlarla.
El propio empresario afirmó el pasado 22 de octubre que necesitaba el control de la empresa para construir un “enorme ejército robótico” con el humanoide Optimus.
“No me siento cómodo construyendo ese ejército de robots si no tengo al menos una fuerte influencia”, dijo.
Precisamente nada más anunciarse la aprobación de la histórica compensación, Musk apareció sobre el escenario instalado en la sede de Tesla en Austin (EE.UU.) entre los gritos de “Elon, Elon” de los asistentes, y acompañado de un robot Optimus que bailaba al ritmo de la música.
Musk, tras agradecer al consejo de administración la aprobación de su compensación, dijo que Tesla iniciará “no un nuevo capítulo sino un nuevo libro” con Optimus.
El empresario adelantó que será el “mayor producto de la historia”, sobrepasando a los teléfonos móviles y anunció que se establecerá una línea de montaje en la planta de automóviles de Fremont, en California, para fabricar un millón de Optimus al año, y otra en Austin con capacidad para 10 millones de unidades.
Aunque Optimus todavía está en fase de desarrollo y no tiene ninguna aplicación real, Musk dijo que prevé que habrá miles de millones de unidades en el futuro que serán capaces de erradicar la pobreza del mundo.
El empresario también afirmó que Tesla es la única empresa preparada para lograr estos objetivos.
“Tesla ya es el mayor fabricante de robots del mundo porque cada vehículo es un robot”, dijo para añadir que “Optimus es un robot con brazos y piernas en vez de un robot con ruedas”. (EFE)




