México renovó su Línea de Crédito Flexible (LCF) con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por un monto de 24 mil millones de dólares, informó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
El nuevo monto de la línea, que estará vigente durante dos años, es inferior al aprobado en 2023 por 35 mil millones de dólares y responde a la intención del gobierno federal de darla de baja a largo plazo.
Esta cifra también refleja una mayor resiliencia de la economía mexicana y un mayor nivel de reservas ante posibles choques financieros externos, de acuerdo con la evaluación previa hecha por el FMI.
“Las autoridades tienen la intención de considerar el acuerdo como una medida de precaución”, dijo Nigel Clarke, subdirector gerente del FMI.
La LCF es un mecanismo de financiamiento que puede ayudar al país en caso de algún problema en la balanza de pagos, con el fin de preservar la estabilidad económica y financiera.
México tiene acceso a este crédito con el FMI desde abril de 2009 y puede ser renovado o cancelado en un lapso de uno a dos años. En caso de solicitar una renovación, se hace una evaluación económica para comprobar que sigue apto para tener la línea.
Sin embargo, en 2017 el gobierno federal externó al organismo sus intenciones de cancelar dicha línea y, paulatinamente, disminuir el monto del financiamiento.
En ese sentido, la SHCP, en conjunto con el Banco de México (Banxico), afirmó que se mantiene el compromiso de preservar la estabilidad de la economía,así como promover un crecimiento económico sostenible en los próximos años.
FMI ve crecimiento débil en México, pero reconoce resiliencia macroeconómica
De acuerdo con la revisión hecha por el FMI, la actividad económica de México mantiene un desempeño débil ante la consolidación fiscal, una política monetaria aún restrictiva y el impacto de las tensiones comerciales.
Pese a ello, el organismo destacó la resiliencia y estabilidad del país frente a la incertidumbre global, respaldadas por políticas macroeconómicas sólidas,marcos institucionales robustos y un tipo de cambio flexible.
El FMI dijo que una consolidación fiscal más ambiciosa evitaría un mayor incremento de la deuda pública y ampliaría el margen de maniobra para enfrentar crisis. También mencionó que una trayectoria más clara de la inflación hacia el objetivo del tres por ciento permitiría un mayor relajamiento monetario.
Para elevar el crecimiento potencial, el FMI subrayó la necesidad de cerrar brechas de infraestructura, reforzar el estado de derecho y profundizar la integración comercial.
En sus proyecciones, el organismo prevé que la economía mexicana crezca uno por ciento en 2025, afectada por políticas internas restrictivas, cambios comerciales en Estados Unidos y una menor demanda externa.
El crecimiento repuntaría a 1.5 por ciento en 2026 conforme disminuyan esos factores y regresaría a su promedio de largo plazo en 2027. La inflación, por su parte, seguiría moderando hasta converger al objetivo del Banco de México.




