En Estados Unidos, quienes concluyen la secundaria ingresan a la preparatoria más cercana a su domicilio sin presentar examen de admisión; sin embargo, ese país no puede tomarse como modelo educativo ni social, al enfrentar problemas graves de valores, drogadicción y descomposición social, afirmó la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, durante la entrega del programa Beca Universal Benito Juárez para Educación Media Superior.
Acompañada por el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri González, la mandataria contrastó ambas realidades y sostuvo que en México el acceso a la educación media superior debe garantizarse como un derecho y no condicionarse a mecanismos de selección, al señalar que los exámenes de admisión no generan mejores estudiantes y durante años dejaron fuera del sistema educativo a miles de personas que concluían la secundaria sin obtener un lugar en la preparatoria.
Sheinbaum Pardo explicó que antes de iniciar su administración se realizaron encuestas para identificar las razones por las que una parte importante de quienes concluyen la secundaria no continuaban en la educación media superior.
Detalló que las principales causas fueron la falta de recursos económicos, la lejanía de los planteles y la falta de identificación con las escuelas, además de los tiempos de traslado, los costos de transporte y las preocupaciones familiares por los horarios de regreso.
En ese contexto, afirmó que su gobierno impulsa la construcción de preparatorias cercanas a los hogares, la reconversión de secundarias que ya no cuentan con turno vespertino en planteles de educación media superior y la ampliación de escuelas donde existe infraestructura disponible, con el objetivo de garantizar el tránsito directo de la secundaria al bachillerato.
La presidenta sostuvo que la entrega de la Beca Universal Benito Juárez para Educación Media Superior forma parte de una estrategia integral para reducir el abandono escolar, junto con la ampliación de la infraestructura educativa y la eliminación de mecanismos de exclusión en el ingreso al bachillerato.
Reiteró que garantizar la permanencia en las aulas es una responsabilidad del Estado mexicano y que el acceso a la preparatoria y a la educación superior no debe depender del lugar de residencia ni de la situación económica.




